Falsificar nunca resultó tan fácil

David Suárez Alonso
david suárez VIGO / LA VOZ

EDUCACIÓN

Ingenieros vigueses desarrollaron un software que detecta documentos alterados que se ha convertido en el sistema de referencia para validar títulos de 12.000 universidades

21 nov 2011 . Actualizado a las 12:16 h.

Si no los primeros, fueron unos de los que comenzaron el camino de la transferencia de conocimiento en Vigo. Start up y Spin-off eran únicamente anglicismos que se mencionaban en conferencias cuando varios ingenieros de la Universidad olívica decidieron montar una empresa para comercializar un sistema capaz de detectar documentos falsificados. Han pasado poco más de tres años y ya han conseguido que Fividoc se haya convertido en una herramienta que se emplea en los grandes ayuntamientos gallegos, en varios organismos estatales y que se ha elegido como sistema de referencia para validar los títulos y expedientes de las 12.000 universidades que forman la red Universia. Todo esto, con un equipo de apenas ocho ingenieros que no paran darle al coco y al teclado desde una oficina de López de Neira.

Para conseguir evitar el fraude de los títulos universitarios, la red que aglutina las universidades de 23 países de Iberoamérica confió en el producto de este grupo vigués. El software surgió de una línea de investigación en la Escuela de Telecomunicaciones de Vigo. Se propusieron crear «una firma electrónica para el papel», es decir, un sistema de protección que detecte las falsificaciones de documentos impresos. Las nuevas tecnologías permitían modificar un título o un expediente administrativo de forma sencilla pero no existían métodos eficaces para certificar su protección o para comprobar que no se habían hecho cambios.

Modificar una fecha, una valoración, las notas del expediente... No hay que ser un gurú de la informática para poder manipular un documento oficial. Fividoc lo detecta tanto sea un cambio en el texto, en una tabla o en una de las imágenes Su uso es automático y la tecnología necesaria muy accesible. Además del programa solo hace falta tener un escáner y conexión a Internet.

La validación

Como sistema de protección tiene otra gran ventaja. «Al contrario que otras tecnologías de seguridad documental, la validación de un documento no implica la revelación de contenido original», explica uno de sus promotores, Alberto Malvido. De esta manera, el sistema cumple con las exigencias de confidencialidad de la nueva Ley Orgánica de Protección de Datos.