Un grupo de investigación de la Universidad de Vigo ha desarrollado los principales sistemas usados en España para garantizar el aislamiento acústico de los edificios
14 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Gracias a un grupo de investigadores de la Universidad de Vigo, lo de escuchar el taconeo de la vecina de arriba o la televisión del piso colindante es cosa del pasado. Sonitum, que agrupa a profesionales del mundo del sonido y la acústica, ha desarrollado una herramienta, compuesta por miles de hojas Excel, con la que todos los promotores pueden calcular los niveles de ruido que pasan de un piso a otro de un edificio.
La herramienta desarrollada en Vigo se puede descargar gratuitamente desde la web creada por el Gobierno para dar a conocer los criterios del Código Técnico de Edificación. Así los promotores pueden garantizar que su edificio cumple con los requisitos legales de ruido. «Hay que cubrir todos los campos y detallar la distribución de los espacios, las conexiones estructurales y los materiales para poder hacer un cálculo global de cómo se reproduce el sonido», explica Manuel Sobreira, uno de los profesores del grupo. Después el propio programa ya indica el nivel de decibelios y si las conexiones entre recintos cumplen los requisitos. «Muchas veces los problemas de ruido se debían a que no había un control global y no se estudiaban los encuentros entre la tabiquería y el forjado», añade.
La última versión del programa, conocido como Documento Básico de Protección Contra el Ruido, lleva colgada en la web del ministerio, hasta hace poco de Vivienda y ahora de Fomento, desde mayo del 2010. Es la versión 2.0 pero el grupo ya está trabajando en una serie de modificaciones que permitirán que el proceso sea más rápido y accesible. «Nuestra intención es hacer una herramienta de cálculo que pese mucho menos, a la que se pueda acceder desde cualquier ordenador y que simplifique más el cálculo», apunta el profesor.
Empresa
Sonitum fue uno de los grupos de investigación de la Universidad de Vigo del que surgió una empresa, Sounds of Numbers. Este caso de spin-off surgió alrededor de un software desarrollado para realizar el proyecto de aislamiento acústico de un edificio completo de una forma sencilla e intuitiva. El Sonarchitect, que es como se llama el programa, se llevó el premio a la mejor aplicación TIC del 2009. A día de hoy, con una segunda versión en el mercado, la herramienta sigue teniendo pocos competidores de sus características en el mundo. Puede reproducir un edificio en tres dimensiones y detectar dónde se producen los errores de aislamiento.