La Fundación La Caixa y Criteria vuelven a Barcelona siete años y medio después de su traslado a Palma

Clara Alba MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Mariscal | EFE

El movimiento sigue así los pasos de Banco Sabadell, que también decidió devolver su sede a Cataluña

05 mar 2025 . Actualizado a las 18:54 h.

Movimiento de enorme calado en el sector empresarial español. La Fundación La Caixa y Criteria acaban de anunciar el regreso de su sede social a Cataluña, un movimiento muy esperado ocho años después de su decisión de salir de la región con destino a Palma de Mallorca, en busca de estabilidad tras el proceso independentista.

En un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), La Caixa informa de que «Criteria Caixa, informa que el Patronato de la Fundación Bancaria Caixa d'Estalvis i Pensions de Barcelona, 'la Caixa', presidido por don Isidro Fainé Casas y actuando como accionista único de Criteria Caixa, ha acordado trasladar su domicilio social a Barcelona, Avenida Diagonal, números 621-629, Torre II».

Las especulaciones sobre el cambio circulaban desde hace tiempo en el mundo empresarial y los corrillos financieros. Pero no por ello el movimiento es menor. Sobre todo porque apuntala el regreso de las empresas que en 2017 decidieron abandonar Cataluña y ahora se plantean volver, en un momento de menor tensión política, ahora con Salvador Illa al frente de la Generalitat.

Banco Sabadell ya hizo lo propio el pasado 22 de enero, abriendo el camino a otras compañías como Naturgy, la propia Criteria y —donde ahora recaen todos los focos— CaixaBank, el banco del que Criteria es el principal accionista.

La sede social de CaixaBank permanece de momento en Valencia, pero el movimiento de Fainé abre una vía para que la entidad replantee su postura. Fuentes de la entidad dirigida por Gonzalo Gortázar remiten a las declaraciones del consejero delegado el pasado 30 de enero, cuando zanjó el debate sobre el posible traslado durante la presentación de resultados: «No vamos a cambiar ni a mover la sede», recalcó.

Pese a reconocer que las circunstancias en Cataluña «han mejorado y eso es muy bueno para todos», insistió en que tras la absorción de Bankia, la CaixaBank de hoy es diferente a la que salió de Barcelona en aquellas circunstancias. El directivo apeló a las raíces de Bankia —el banco que nació de la fusión de la valenciana Bancaja y la madrileña Caja Madrid y que tenía su sede en la capital del Turia en el momento de la operación— para justificar esta vocación de permanencia. «Por eso hablamos de ese carácter indefinido y reafirmamos nuestra voluntad de que no vamos a mover la sede», subrayó.