Las inversiones industriales captadas este año en Aragón multiplican por diez las anunciadas en Galicia

Beatriz García Couce
beatriz couce REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

El presidente de Aragón, a la derecha, recibe a la delegación china de CATL que impulsa, junto a Stellantis, una gigafactoría en esa comunidad
El presidente de Aragón, a la derecha, recibe a la delegación china de CATL que impulsa, junto a Stellantis, una gigafactoría en esa comunidad Fabian Simon | EFE

Los proyectos tecnológicos y logísticos movilizan 40.000 millones de euros

12 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Si hay una comunidad que capitalice actualmente las grandes inversiones, esa es Aragón. El anuncio realizado el pasado martes por el grupo automovilístico Stellantis —matriz de Fiat, Opel, Citroën y Peugeot, entre otras marcas— junto a la china CATL para instalar una gigafactoría de fabricación de baterías para los vehículos eléctricos en Figueruelas (Zaragoza) es el último de un goteo que agranda el milagro industrial de la comunidad. El balance de este 2024 deja cifras superlativas, con inversiones que rondan los 40.000 millones de euros —aunque algunas tienen alrededor de una década de recorrido— y cerca de 21.000 puestos de trabajo. El impacto económico de esa cesta de proyectos multiplica por diez la suma de las grandes actuaciones empresariales anunciadas para Galicia.

Las compañías tecnológicas son las que están propiciando el mayor impulso industrial en Aragón, a través de inversiones multimillonarias para la implantación, fundamentalmente de centros de datos. La de mayor envergadura es la anunciada por Amazon Web Services, tendente a ampliar los tres complejos de los que ya dispone en la comunidad, en los que prevé inyectar 15.700 millones de euros y contribuir a la generación de 17.500 empleos. Microsoft, con 6.600 millones de euros; Box2bit, con 3.400 millones —aunque con una ampliación asegurada de otros 1.000—, y el fondo de inversión estadounidense Blackstone, con 7.500, lideran también otros data center en distintos emplazamientos aragoneses, con una especial trascendencia en Zaragoza. Pero su cartera de proyectos alcanza otros sectores, como la mencionada gigafactoría, que requerirá de una inversión de 4.100 millones, y otras más modestas en logística, como la ampliación de la plataforma zaragozana de Inditex

Galicia también cuenta con una potente cartera de proyectos industriales, alrededor de una treintena, que abarcan distintos sectores. Sin embargo, la química verde cuenta con un papel importante, con distintas plantas de hidrógeno, metanol y amoníaco verde en marcha. La fábrica de fibras textiles de Altri en Palas de Rei, con una inversión de 900 millones; la de Stellantis para su centro de Vigo, con más de 500; y la de la china Sentury Tire para la fabricación de neumáticos en As Pontes, con otros tantos, encabezan el ránking en la comunidad.

Sin embargo, mientras la cadena de grandes iniciativas empresariales no se detiene en esa comunidad del nordeste del país, en Galicia se aprecia una ralentización en la llegada de nuevas actuaciones. Tanto los expertos energéticos como los impulsores de las nuevas industrias y centros de datos de Aragón y las autoridades coinciden en afirmar que uno de los factores determinantes para su implantación en la comunidad es la disponibilidad de energía renovable, más barata, lo que eleva la competitividad de esas futuras plantas frente a las de otras zonas.

Por ello, la mayoría de esos proyectos ya nacen asociados a los conocidos como PPA (por sus siglas en inglés), que son contratos de suministro de energía verde a largo plazo. Y la firma de esos acuerdos es posible por la cada vez mayor implantación de nuevas capacidades energéticas renovables. Solo en los últimos cinco años, la potencia verde de Aragón se ha incrementado en un 42,33 %, mientras que en Galicia no llegó ni al 1 %.

Manuel Pazo, presidente de la Asociación Eólica Gallega (EGA), calcula que, solo en parques del sector, Aragón invirtió en un lustro alrededor de 1.500 millones de euros. En Galicia no llega ni a los 200 en ese mismo período. La falta de nueva capacidad y la situación de bloqueo judicial que padece el sector —que tiene en suspenso cerca de 3.000 nuevos megavatios de unos 60 parques— está dificultando la firma de PPA entre los promotores eólicos y las empresas que podrían tener interés en implantarse en territorio gallego. «Con la inseguridad jurídica que tenemos, es imposible firmar PPA, ya que no sabemos cuándo podremos empezar a suministrar la energía», subraya Pazo. 

Características similares

La generación de energía verde en Aragón supera el 80 %; en Galicia, el 85 %. Además, ambas comunidades cuentan con suelo industrial disponible y grandes cantidades de agua. Factores, todos ellos, determinantes para la captación de proyectos industriales como los centros de datos. Sin embargo, la incertidumbre que se cierne sobre el eólico y también su posición geográfica —Aragón con mejores comunicaciones, también en cuanto a redes de datos— inclinan la balanza hacia esa comunidad. Inversiones industriales como la proyectada por Forestal del Atlántico en Mugardos han completado su tramitación, pero otras están directamente vinculadas a contar con grandes bolsas de energía renovable, que ahora mismo no está garantizada.