La Unión Europea y Mercosur acuerdan crear una zona de libre comercio tras 25 años de negociaciones
ECONOMÍA

Logran un acuerdo «político» y el texto entrará ahora en proceso de ratificación con el rechazo expreso de Francia
06 dic 2024 . Actualizado a las 15:07 h.Tras 25 años de negociaciones y numerosos escollos para su ratificación, la Unión Europea (UE) ha cerrado este viernes el acuerdo comercial con Mercosur. El viaje exprés de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, este jueves y viernes, ha servido para dar un último impulso a las negociaciones y cerrar el pacto. «El acuerdo ya está a la vista», adelantó el jueves la política alemana. Y el ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Omar Paganini, lo confirmó horas después tras reunirse con el comisario de Comercio, Maros Sefcovic: «Se ha arribado a un texto de común acuerdo».
La presidenta del Ejecutivo comunitario ha anunciado el acuerdo junto a los líderes de los países de Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay) reunidos en Montevideo. «Este acuerdo es una victoria para Europa. 30.000 compañías europeas ya exportan a Mercosur y les seguirán más», ha subrayado. El pacto servirá «para desarrollar industrias estratégicas y generar puestos de trabajo y valor a los dos lados del Atlántico», ha añadido.
El pacto comercial será «el más grande del mundo» con un mercado de más de 700 millones de personas, señaló Von der Leyen y llega en un momento crucial para Europa, con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y las tensiones comerciales con China. España y Alemania han sido los grandes interesados en firmar el acuerdo y tiene como objetivo también buscar otros mercados ante las posibles medidas proteccionistas que traerá la segunda era Trump.
El portavoz de la Comisión Europea responsable de Comercio, Olof Gill, ha destacado que se trata de un «acuerdo político, una primera etapa para lograr su ratificación». Y es que el texto deberá pasar ahora el filtro del Consejo y del Parlamento Europeo, donde deberá recibir el visto bueno de los Veintisiete y de los eurodiputados. No será un proceso fácil, ya que Francia -actualmente sumida en una crisis política-, Polonia, Países Bajos y Austria se han mostrado contrarios al pacto y fuentes italianas también han señalado que, en su opinión, «no hay condiciones para suscribir el actual texto» y condiciona su apoyo a que haya «medidas concretas que den respuesta a sus preocupaciones y compensen los desequilibrios en el sector agrícola».
Si Italia finalmente se suma al veto, estos estados podrían formar una minoría de bloqueo -de al menos cuatro países que representen el 35% de la población europea- para frenar su ratificación. Después de la luz verde de los Estados miembros, el acuerdo deberá recibir el visto bueno de los grupos políticos en la Eurocámara, donde tiene que lograr una mayoría simple.