La Comisión Europea denuncia a China ante la OMC por sus aranceles al brandi europeo

Olatz Hernández BRUSELAS / COLPISA

ECONOMÍA

Benoit Tessier | REUTERS

El Ejecutivo comunitario considera que son solo una represalia «sin fundamento» en represalia por los impuestos en la UE a los vehículos eléctricos del gigante asiático

08 oct 2024 . Actualizado a las 20:19 h.

Continúa el tira y afloja comercial entre China y la Unión Europea (UE). La Comisión Europea anunció ayer que denunciará al gigante asiático ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por los aranceles que impondrá a las importaciones de brandi europeo. Las autoridades chinas han asegurado que pondrán en marcha esta medida apenas unos días después de que los Estados miembros dieran vía libre al Ejecutivo comunitario para imponer un gravamen de hasta el 35,3 % a los vehículos eléctricos chinos importados a la UE.

El portavoz de la Comisión en materia de Comercio, Olof Gill, aseguró en un mensaje en sus redes sociales que los aranceles anunciados por Pekín son «medidas que carecen de fundamento» y que Bruselas «está determinada a defender a la industria europea frente al abuso de instrumentos de defensa comercial».

Pekín ya ha abierto investigaciones sobre productos europeos, como la carne de cerdo, varios productos lácteos y el brandi, para presionar a los Veintisiete. Sin embargo, tras la luz verde de las capitales a los aranceles a los vehículos eléctricos de fabricantes chinos, el Ministerio de Comercio del gigante asiático anunció que a partir de este viernes impondrá tasas de entre el 30,6 % al 38 % a una serie de marcas europeas de brandi —entre las que se encuentran las españolas Bodegas Osborne y Miguel Torres—.

Las negociaciones, en riesgo

La Comisión Europea inició hace un año una investigación sobre los subsidios «injustos» que reciben los fabricantes chinos de coches eléctricos y que ponen en desventaja a sus competidores europeos. Ante estas conclusiones, Bruselas puso en marcha unos aranceles temporales, que se convertirán en permanentes a partir del 31 de octubre, con una duración de cinco años. La UE diferenciará entre las compañías que no han colaborado —a las que impondrá una tasa mayor y que llegará hasta el 35,3 %— y aquellas que sí lo han hecho, a los que aplicará una tasa del 20,7 %. A estas cifras se le sumará la tasa del 10 % que ya se aplica a los vehículos chinos importados.

Las negociaciones entre Bruselas y Pekín aún siguen abiertas, y la Comisión ha abierto la puerta a retirar los aranceles si se encuentra una «solución alternativa» compatible con las reglas de competencia justa de la OMC. Las medidas anunciadas contra el brandi europeo, sin embargo, empañan estas negociaciones y aumentan la tensión comercial.