Abanca compra EuroBic y consolida su posición como gran banco en Portugal

Manoli Sío Dopeso
M. Sío Dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Abanca

La entidad adquirida gestiona un volumen de negocio de 11.658 millones de euros, tiene una red de 179 oficinas y una plantilla de 1.400 trabajadores

16 nov 2023 . Actualizado a las 12:29 h.

Portugal es el segundo destino de las exportaciones gallegas. Su economía avanza de forma robusta —a pesar de la repentina reciente crisis de Gobierno que ha desencadenado unas nuevas elecciones—, y ofrece las mejores oportunidades de crecimiento y complementariedad a las empresas y, en general, al tejido socioeconómico de Galicia. Todo estos son argumentos más que convincentes que explican la fuerte expansión de Abanca en el mercado financiero portugués, en donde lleva ya operando diez años.

En este tiempo, el crecimiento corporativo vía adquisiciones de entidades implantadas en suelo luso ha sido una seña de identidad del banco que preside Juan Carlos Escotet. Pero en los últimos tiempos Abanca ha acelerado este proceso para convertirse en uno de los grandes bancos de Portugal, un objetivo consumado con la compra anunciada este miércoles de Banco BIC Português (EuroBic) una institución financiera lusa fundada en el 2008 en Lisboa, que en el 2012 adquirió al Gobierno luso el negocio comercial del Banco Portugués de Negocios, consiguiendo presencia en todo el territorio nacional.

Abanca se hace así con el noveno banco portugués por activos totales (7.900 millones de euros), que cuenta con 179 puntos de venta y 1.400 empleados, que atienden a una base de 240.000 clientes (190.000 particulares y 50.000 empresas). Estas dimensiones llevarán a la entidad gallega a triplicar su presencia en el país luso al multiplicar por cuatro su número de clientes, por tres su volumen de negocio y por tres y medio sus puntos de venta en territorio portugués, según estimaciones de Abanca que, sin incluir a EuroBic, este año ha superado 96.000 altas de clientes en España y Portugal, —a lo que ha contribuido la integración de Targobank, recientemente adquirido—, y ha ganado cuota de mercado en los principales territorios y negocios.

«La operación supondrá un 9,5 % del total de los activos de Abanca, un 10,1 % de sus préstamos, un 10,5 % de sus depósitos y un 15,1 % en su margen básico», explicó ayer la entidad que preside Escotet en un comunicado.

Abanca comenzó a negociar la adquisición del banco portugués en el 2020, pero el acuerdo no fue posible entonces por discrepancias con la principal accionista de EuroBic, Isabel dos Santos, dueña del 42,5 % del capital. Fuentes portuguesas del entorno de la operación afirman que los accionistas angoleños agrupados en torno a la cúpula del banco reabrieron el proceso competitivo por EuroBic a finales de ese mismo año, cuando fuentes del mercado financiero luso valoraron la operación en torno a los 200 millones. Entre los interesados que se acercaron a la entidad estaban los fondos americanos Apollo y JC Flower, el Banco de Correos CTT y NovoBanco. Pero ha sido finalmente Abanca la que se ha impuesto después de quedarse a finales del año pasado como único postor, según acabó descubriendo el propio EuroBic en su informe anual.

Escotet se refirió ayer a esta nueva compra situándola «en el marco de nuestra estrategia de posicionamiento como entidad de vocación ibérica, en la que Portugal ha sido siempre una prioridad para Abanca». En palabras del presidente de la entidad gallega, la portuguesa «es una de las economías más dinámicas de la eurozona y un mercado natural para nosotros por su intensa interrelación económica y cultural con España, y en especial con las áreas geográficas de liderazgo de Abanca».

El consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, también valoró la operación: «Nos permite optimizar la presencia de Abanca en Portugal y nos proporciona una elevada complementariedad en líneas estratégicas. Supondrá claras sinergias de ingresos, un mayor desarrollo en banca universal, potencial de crecimiento en fuera de balance y seguros, y un fuerte posicionamiento en medios de pago, en particular en la actividad de adquirencia».

EuroBic es una entidad local genuina del mercado portugués. Gestiona un volumen de negocio de 11.658 millones de euros, cuenta con una cartera de crédito de 5.167 millones y acumula depósitos por 6.280 millones. Al cierre del primer semestre del 2023, EuroBic contaba con una ratio de rentabilidad (ROTE) del 15% (a partir del doble dígito los expertos consideran que es una cifra adecuada).

En cuanto a solvencia, registra una ratio CET1 del 15,5%, una tasa de mora del 4,0% (con una cobertura 83% de esos créditos morosos) y una ratio de préstamos sobre depósitos del 82% (es decir, puede financiar los créditos que concede con los depósitos que atesora).

El cierre de la compra está todavía sujeto a la autorización de las autoridades competentes, aunque está previsto que se realice en junio del 2024. Posteriormente, se abordará la integración tecnológica.

Más clientes ibéricos

En los nueve primeros meses del año, Abanca ha otorgado más de 7.000 millones en crédito a familias y empresas. Estos dos amplios colectivos, con porcentajes del 40 y el 42 %, respectivamente sobre el total, reciben más de ocho de cada diez euros de la inversión crediticia realizada por el banco. Las nuevas formalizaciones de préstamos han crecido un 3,7 % en España y el 17,5 % en Portugal.

En ambos países la entidad está ganando cuota de mercado en segmentos de negocio clave. En hipotecas, el incremento del 12,6 %

en las formalizaciones, hasta un importe total de 1.174,0 millones de euros, se ha traducido en crecimientos de la cuota de mercado de nuevas operaciones, lo que le ha permitido ganar terreno en ambos mercados (con aumentos superiores a 93 puntos básicos en ambos). En empresas, la nueva financiación aumentó un 6,1 % y también araña 3 puntos básicos de cuota en la nueva concesión a estos clientes en España y 58 en Portugal.

Una década de crecimiento corporativo con ocho adquisiciones materializadas

Abanca siempre se ha mostrado como una entidad abierta a operaciones de compra con el objetivo de ganar tamaño y cuota de mercado. En esa estrategia se enmarca la adquisición de EuroBic, que es la octava que acomete la entidad gallega en la última década.  Desde que en el 2013 el banquero Juan Carlos Escotet adquirió la antigua Novacaixagalicia —entonces nacionalizada— al FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) para convertirla en la actual Abanca, la entidad ha protagonizado sucesivos movimientos en el mercado de fusiones y adquisiciones. Así, en el 2014 culminó su proceso de fusión con Banco Etcheverría. En el 2017 adquirió Popular Servicios Financieros. Un año después se hizo con la filial del Deutsche Bank en Portugal, lo que le permitió alcanzar los 70 puntos de venta y un volumen de negocio de casi 7.000 millones de euros; y en el mismo año también compró a Caixa Geral de Depósitos su negocio en España. En el 2020 adquirió Bankoa a Crédit Agricole; y en el 2021 integró el negocio de Novo Banco en España.

El pasado mes de octubre, el banco gallego culminó el proceso de integración de Targobank, adquirido a finales del 2022. Según desveló la firma financiera en su informe del tercer trimestre, su número de oficinas en la comunidad se ha elevado hasta las 437 tras incorporar las 2 de Targobank.

Esta integración aparece ya computando en los resultados del tercer trimestre de Abanca, en el que el banco ha conseguido triplicar sus beneficios. Tras cerrar el primer semestre duplicando ganancias (278 millones de euros) respecto a los seis primeros meses del 2022, el negocio de Abanca siguió al alza en el tercer trimestre, hasta concluir los nueve primeros meses de este 2023 con unas ganancias netas atribuidas de 428,6 millones de euros, tres veces más que entre enero y septiembre del año pasado (cuando contabilizó un beneficio atribuido de 141,4 millones de euros.).

Además de la integración de Targobank, Abanca atribuye sus buenos resultados a la subida de los tipos de interés, y a la menor carga en provisiones. En cuanto a la solvencia su capital se situó en el 17,3 % con un exceso de solvencia sobre requisitos de 1.528 millones de euros.