
El alcalde recuerda que el desmantelamiento de la planta, que el comité ve «prematuro», sigue dando empleo
20 ago 2023 . Actualizado a las 12:37 h.No por esperado el cierre de la central de As Pontes ha causado menos conmoción en la comarca. Apenas quedan 100.000 toneladas de las últimas remesas de carbón que se van a quemar y este fin de semana el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó la autorización para desconectar toda la planta tras recibir el correspondiente informe favorable de Red Eléctrica de España.
Valentín González Formoso es alcalde de As Pontes, presidente de la Diputación, y también uno de los vecinos que declara que «crecimos viendo la chimenea». No quiere dejar ni un resquicio al lamento: «En España hay otros 14 sitios en los que ha ocurrido una situación similar», alerta para insistir en que ya hay nuevos proyectos en marcha para dar el relevo a la actividad industrial en la comarca. Insiste en que los permisos para la planta de hidrógeno y la de bombeo llevan buen ritmo, además de que las empresas están dedicando muchos millones a materializarlos.
Cobertura para trabajadores
Para González Formoso lo primordial ahora es que los trabajadores de todos los sectores tengan cobertura hasta que se desmantele la planta y otra industria tome el relevo. «La demolición se va a alargar durante cinco o seis años, durante los que seguirá generando ocupación y el resto de proyectos para generar empleos estarán lo antes posible», precisa el alcalde de una villa para la que sigue viendo futuro en el sector. «Vamos a ser positivos, esta solo es una etapa más, como muchas que ha pasado As Pontes con la llegada de otras firmas».
Ricardo Casas, presidente del comité de empresa de Endesa, muestra su tristeza por una decisión que, a su entender, supone «darle la puntilla a una central que era un referente industrial en España».
Cuenta que hay 61 trabajadores en la planta y que otros 80 pertenecen a empresas auxiliares. Para todos esta decisión marca su futuro, aunque a todos se les ha prometido una recolocación en los trabajos que suponen la demolición de la térmica, pero lo cierto es que hay muchos flecos por concretar, según comenta. «Para empezar todos los trabajadores que han sido desplazados, para los que primero se han comprometido unas cuestiones que no sabemos cómo quedarán», detalla sobre unos movimientos de personal que en algunos casos recuerda que le han cambiado la vida a muchas familias. Ricardo Casas también considera que, tal y como está el mercado de la energía esta decisión es, cuando menos, «prematura».
El portavoz de la Asociación do Colectivo do Transporte do Carbón (ACTC), Manuel Bouza Cholo, reconoce que se esperaba la noticia, pero anuncia que los transportistas han iniciado gestiones en Bruselas para que se reconozca la situación «por la que han pasado». Recuerda que quedan 43 empresas y unos 80 camiones en los que trabajan otros 80 conductores muy tocados por este desmantelamiento.
Retrasos
«Paréceme moi mal que se anuncie en plenas vacacións para amargarlle a vida a moita xente», precisó para denunciar que las inversiones y las nuevas empresas que se han anunciado no han llegado a buen puerto. «Díxose que ía a vir unha firma de neumáticos no 2021 e nada», se queja. El colectivo no descarta continuar con las protestas: recuerda aunque no han convocado manifestaciones en la calle, pero han seguido defendiendo sus derechos presentando reclamaciones en los organismos pertinentes.
Endesa, por su parte, emitió este sábado un comunicado reafirmando su «compromiso con Galicia» tras el cierre, con un plan que —insiste— supone la creación de 1.300 empleos directos» y que incluye la instalación de nuevas fábricas, como las de Sentury Tire y Ence, que se implantarán en terrenos de la compañía en As Pontes.