Unicaja cierra su crisis institucional y nombra a Isidro Rubiales consejero ejecutivo

C. V. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

UNICAJA BANCO | EUROPAPRESS

La renovación del órgano de gobierno del grupo bancario responde una grave crisis institucional

31 jul 2023 . Actualizado a las 20:52 h.

El consejo de administración de Unicaja Banco acordó ayer la designación como consejero ejecutivo del banco de Isidro Rubiales Gil, que sustituirá a Manuel Menéndez cuando sea efectivo el nombramiento, una vez obtenidas las autorizaciones regulatorias, según comunicó la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), sin precisar cuándo prevé que se haga efectivo el relevo.

El pasado 1 de junio, el consejo de administración de Unicaja Banco acordó por unanimidad el cese en el cargo de consejero delegado a Manuel Menéndez, decisión que sería efectiva en el momento en que se nombrara como consejero a quien se designara para sucederlo en ese puesto. En el hecho relevante remitido por la entidad financiera en ese momento, hace ahora dos meses, se declaraba que el objetivo del cese era «avanzar de manera más ágil y eficaz en la definición del modelo de gobernanza, conforme a las previsiones del proyecto común de fusión entre Unicaja Banco y Liberbank».

La renovación del órgano de gobierno del grupo bancario responde una grave crisis institucional que hizo intervenir a los supervisores financieros y también al propio Ministerio de Asuntos Económicos, liderado por Nadia Calviño. La crisis culminó el pasado 30 de marzo, cuando Unicaja Banco renovaba a varios miembros de su consejo de administración que no contaban con la confianza de la institución porque habían contribuido a elevar el poder del bloque asturiano en el grupo en detrimento del local.

Con el relevo se da también cumplimiento al acuerdo de fusión entre Unicaja y Liberbank, que establecía que en un plazo de dos años desde la culminación de la operación, es decir, antes del 30 de julio del 2023, tenía que modificarse el modelo de gobernanza, de manera que el presidente del consejo debería dejar sus funciones ejecutivas para además reevaluar al consejero delegado, Manuel Menéndez.

De esta manera, Rubiales se convertirá en un consejero delegado con poder ejecutivo, lo que acabará con la bicefalia existente hasta la fecha en al frente del grupo. Aunque todavía debe obtener el visto bueno del Banco Central Europeo.