Los alimentos moderan su escalada, pero aún se encarecen un 12,9%

Sara Cabrero
S. Cabrero REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Una mujer comprando en un supermercado, en una imagen de archivo
Una mujer comprando en un supermercado, en una imagen de archivo Juan Ignacio Roncoroni | EFE

El IPC general vuelve a repuntar un 4,1%, al compararse con un año antes, cuando se pusieron en marcha medidas anticrisis

12 may 2023 . Actualizado a las 20:10 h.

El mes de abril concedió un respiro (aunque muy leve) a la economía familiar. Sobre todo, a la hora de llenar la despensa. Los alimentos —que llevan año y medio encareciéndose de manera vertiginosa— moderaron su escalada en el mes de abril, cuando se encarecieron un 12,9% con respecto al mismo mes del 2022. Sí, el precio de estos productos volvió a subir, pero lo hizo en menor medida que en marzo, cuando registró un ascenso del 16,5%. Lo que supone que la inflación interanual de abril fue 3,6 puntos menor a la que se registró en marzo.

El dato trae de la mano algo de optimismo. Porque tal y como explican desde el Instituto Nacional de Estadística (INE), la moderación que ha experimentado la inflación de los alimentos —muy influida por el descenso que han registrado los tiques de legumbres y hortalizas y por el menor aumento de los de la carne, el pan, los aceites o la leche y los huevos— es la mayor de la serie histórica. Esto podría suponer que la escalada en la que lleva inmersa la cesta de la compra desde hace tantos meses empieza ya a echar el freno.

Pero llenar el carro sigue siendo todavía un esfuerzo importante para muchos españoles. La leche cuesta ahora un 27,6% más que hace justo un año, mientras que el aceite de oliva requiere invertir un 22,2% más. Los cereales han subido un 18,2% y las patatas un nada desdeñable 16,5%. Por su parte, la carne de cerdo o los huevos —ambos productos básicos en el menú de tantas familias— se encarecieron más de un 15%. Y el azúcar vuelve a convertirse en protagonista absoluto de abril, al ser el producto que más ha subido: un 49,6%.

La otra cara de la moneda es la energía. Sigue en descenso y su precio se ha reducido un 15,6%, al igual que los carburantes que, eso sí, lo hacen en menor medida: cuestan un 4,3% menos.

La tasa general sube un 4,1%

El optimismo se diluye cuando se analiza el dato del IPC general, que volvió a repuntar en abril después del respiro de marzo. En el cuarto mes del año cerró con un alza del 4,1%, lo que supone ocho décimas más que la tasa de marzo, cuando se situó en el 3,3%. Poca sorpresa en este comportamiento. Y es que este incremento era esperado, al comparar los precios actuales con los de abril del año pasado, cuando se pusieron en marcha las primeras medidas para paliar la crisis derivada de la guerra de Ucrania, entre las que destacaba el descuento de 20 céntimos al litro de carburante. Si hasta ahora era la subyacente la que traía el mayor jarro de agua fría, parece que esta inflación trae ahora con algo más de esperanza. Esta tasa —un indicador muy analizado ya que no incluye ni la energía ni los alimentos frescos por ser los elementos más volátiles— se situó en el 6,6?%, lo que supone una bajada de un punto porcentual con respecto a lo registrado en el mes de marzo.

El Ministerio de Economía celebró los datos asegurando que son muy positivos: «Las medidas adoptadas por el Gobierno en enero [entre las que se encuentra la rebaja del IVA de algunos alimentos] están amortiguando la evolución de la inflación», aseguraron. Pero el horizonte aún parece algo oscuro. Las previsiones de los organismos apuntan a que la inflación de los alimentos no se enfriará este año. El Banco de España prevé un crecimiento del precio de las viandas del 12,2% a finales de este 2023, mientras que Funcas mantiene que la subyacente se quedará en el 6,6%.

La mitad de los productos básicos son más caros que antes de la reducción del IVA

E. M. / Madrid / Colpia

La rebaja del IVA de los alimentos básicos que entró en vigor el pasado 1 de enero no se está aplicando correctamente en las grandes superficies, según ha vuelto a constatar Facua tras analizar 1.000 productos en los ocho supermercados más importantes del país durante el mes de mayo. En concreto, 438 de los 1.000 precios analizados son superiores ahora que en diciembre, lo que supone el 44% del total.

De todos los productos que han subido de precio pese a la bonificación del IVA, el 33% son frutas y verduras, el 18% son aceites de oliva y girasol, y el 15% son leches y lácteos. Además, el 14% son arroces y pastas, el 8% son legumbres y el resto huevos, harina y panes.

Un análisis de Fedea reveló que la rebaja del IVA de los básicos tiene un impacto «positivo, aunque de poca importancia» sobre el efecto redistributivo del impuesto. Los autores del estudio estimaron que el ahorro medio para el conjunto de los hogares españoles es de 39,14 euros, lo que suponen 6,50 euros al mes, siendo las familias con más ingresos las que se benefician en mayor medida de la rebaja.