Colapso en la Seguridad Social: CC.OO. y CSIF solicitan permiso para una huelga parcial

La Voz REDACCIÓN

ECONOMÍA

Eduardo Parra | EUROPAPRESS

Ambos sindicatos planean paralizar el trabajo de los funcionarios todos los viernes desde el 26 de mayo

11 may 2023 . Actualizado a las 09:07 h.

Los sindicatos Comisiones Obreras (CC.OO.) y CSIF han dado este miércoles un ultimátum al Ministerio de Inclusión y Seguridad Social: o cumplen con los compromisos de refuerzo de la plantilla o habrá huelga en todo el territorio español. 

Al equipo del ministro José Luis Escrivá solo le queda una oportunidad. Será este jueves, en la última reunión que mantendrá la Mesa Delegada. Según fuentes sindicales, si insisten en llevar adelante el plan de intensificación -comprende medidas que rechazan como el pago de seis euros por ciudadano atendido fuera del horario laboral- e ignorar las peticiones de contratación para cubrir vacantes que llevan vacías una década, no habrá vuelta atrás: habrá parones parciales en todas las oficinas de la Seguridad Social en España. 

El primer paso lo han dado este miércoles, después de solicitar formalmente ante la Dirección General de Trabajo permiso para convocar una huelga a partir del 26 de mayo. Los parones se repetirán todos los viernes, desde las 10.30 hasta las 11.30. Del documento del preaviso se ha descolgado UGT. Sus responsables explican que respaldarán la huelga «solo si la consulta a los trabajadores nos da un apoyo mayoritario. Una huelga fracasada es un retroceso del que no seremos responsables», deslizan. 

Para las otras dos organizaciones, ya es demasiado tarde. Consideran «inevitable» la protesta porque llevan desde octubre del año 2022 rechazando las «improvisaciones» y los «parches» propuestos desde el Ministerio para aliviar la sobrecarga de trabajo y mejorar la atención ciudadana, en situación de colapso a raíz de la introducción del sistema de cita previa

Los funcionarios se quejan de que la plantilla de la Seguridad Social y, especialmente la del INSS, está «envejecida», es «claramente insuficiente» y critican las «nulas ofertas de empleo público extraordinarias» y la excesiva carga de trabajo asumido por la puesta en marcha de nuevas prestaciones, como el ingreso mínimo vital (IMV).

También denuncian la deslocalización de expedientes y una «privatización encubierta» de los servicios de la Seguridad Social. «Nunca un servicio público puede originar perjuicio económico a la ciudadanía en su relación con la Administración sino, más bien, facilitar dicho acceso con el menor coste moral y económico posible», argumentan en la solicitud de huelga. 

Escrivá niega que no se atienda sin cita previa

Lejos de templar los ánimos, el ministro Escrivá ha insistido este miércoles en negar que los ciudadanos tengan problema alguno a la hora de consultar a la Seguridad Social. Respondiendo a las críticas de la oposición, aseguró: «Han estado ustedes mintiendo y diciendo que a la Seguridad Social había que ir con cita previa. No es verdad. Al 25% de las personas se las atiende directamente. Y hay gente que les ha creído».  

Lo cierto es que, desde la reapertura en pandemia, casi todas las oficinas están flanqueadas por guardias de seguridad que reclaman el justificante de cita previa presencial para dejar pasar a cualquier ciudadano.