La productividad de las empresas cae hasta el aprobado raspado

l. p. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

ALBERTO LÓPEZ

La elevada presión fiscal penaliza la competitividad de las compañías y casi la mitad tiene un nivel de eficacia nulo o bajo

25 abr 2023 . Actualizado a las 19:17 h.

La elevada presión fiscal que afrontan las empresas españolas, tanto a nivel de impuestos como de cotizaciones, está ya impactando de lleno en su productividad, que, lejos de recuperarse, está en caída libre. Y ya lleva demasiado tiempo en esta senda negativa, que se inició en la anterior crisis financiera. Así se desprende de un informe de Adecco Outsourcing publicado este martes, en el que las compañías españolas obtienen un aprobado raspado en un tema tan vital como la productividad. Es más, prácticamente la mitad tiene un nivel de productividad nulo, muy bajo o bajo, mientras que, en el lado contrario, apenas un 18% reciben una calificación de sobresaliente. Un tema que no es baladí, más cuando la CEOE defiende que la subida salarial debe regirse por la productividad de las empresas y sectores, y no en base a la inflación, como reivindican los sindicatos.

Concretamente, el nivel de prosuctividad y eficiencia medio de la empresa española se sitúa en 54,40 puntos en una escala de 0 a 100, lo que supone que se ha recortado 4,38 puntos porcentuales en apenas un año, según Adecco, que culpa a la reforma laboral. Y eso que aún no había entrado en vigor el nuevo salario mínimo de 1.080 euros al mes, la cotización adicional de 0,6 puntos para todos los trabajadores para pagar las jubilaciones del baby boom o la subida del 8,6% de las bases máximas. Y a la espera de las nuevas sobrecotizaciones que impone la recién aprobada reforma de las pensiones. Así, crecen con fuerza las compañías que tienen una productividad nula (que escalan hasta el 19,13%) y muy baja (12,51%), mientras que se reducen de forma significativa aquellas que obtienen una calificación alta (un 12,56%) o muy alta (5,49%).

 Banca y alimentación, los sectores más competitivos

Este lastre se debe en gran parte a que el tejido empresarial está compuesto de empresas pequeñas o muy pequeñas, puesto que las compañías de menos de 10 empleados son las que muestran una sensibilidad menor hacia la productividad, con 43,62 puntos, por lo que suspenden. En la otra cara, las más productivas son las de 250 a 1.000 empleados, con 60,47 puntos. Los sectores más competitivos son banca (64,85 puntos sobre 100), y alimentación (62,65); y el menos, la Administración (46,44 puntos).