Las empresas en España pagan más cotizaciones sociales que en 23 países de la UE
ECONOMÍA
Es el tercero donde más han subido las aportaciones a la Seguridad Social en la última década
19 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.El Gobierno acaba de aprobar una subida de las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social con la que prevé ingresar cada año 15.000 millones de euros más. Los empresarios advierten de que, con esta reforma, se ponen en peligro miles de trabajos y se frenan subidas salariales.
España es el tercer país de la Unión Europea (UE) donde las compañías abonan más cotizaciones sociales medidas en porcentaje sobre el producto interior bruto (PIB). En concreto, el 10 %, el mismo porcentaje que en Francia, y solo superado por Estonia (11 %) y la República Checa (10,2 %), según el último informe de Eurostat Taxation Trends 2022, con datos del 2020. En Alemania, por ejemplo, representan el 7,3 % del PIB y en Portugal, el 6,3 %.
Además, España es el tercer país donde más ha subido la aportación de las empresas a la Seguridad Social en una década: 1,6 puntos del PIB. Si se incluyen las cotizaciones sociales a cargo del trabajador, España está más cerca de la media europea: las contribuciones sociales totales representan el 13,8 % del PIB frente al 13,5 % del PIB de media en la UE.
Reforma
No obstante, el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, asegura que con los nuevos recargos apenas aumentarán los costes laborales por hora: calcula que pasarán de los 23,4 euros actuales a 23,5 euros y después, en el 2050, a 23,8 euros.
La reforma aprobada introduce una cuota de solidaridad sobre las rentas salariales más altas (que supondrá en el 2045 hasta un 7 % más de cotización sobre la parte de renta que excede de la base máxima reguladora, ahora situada en 54.000 euros) y el endurecimiento del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI) que se ha introducido este año y cuyo tipo impositivo se eleva del 0,6 % actual al 1,2 %.
Los expertos advierten de la necesidad de tomar medidas para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones, un sistema que reclama cada año más transferencias del Estado para cubrir el pago de las prestaciones. Antes de los recargos aprobados, el sistema necesitaba alrededor de 39.000 millones en transferencias estatales, algo más del 25 % de los 152.000 millones previstos de ingresos por cotizaciones, según los cálculos del BBVA Research.
