El crecimiento de las ventas durante el cuarto trimestre se limitó al 3,1%, frente al 8,7 % anotado de abril a junio
08 feb 2023 . Actualizado a las 18:39 h.La crisis energética, con un fuerte repunte de los costes energéticos para las compañías, ha hecho mella en la actividad de las grandes empresas españolas. Especialmente, en el último trimestre del 2022, cuando se experimentó una notable moderación en las ventas de las compañías, que ya llegaban a medio gas tras un ejercicio marcado por el estallido de la guerra en Ucrania.
Así lo reflejan la estadística publicada este miércoles por la Agencia Tributaria, donde se observa cómo las ventas totales de estos grupos apenas crecieron un 3,1% en el último trimestre del ejercicio. Una cifra inferior al 5,7 % del tercero, lejos del 8,7 % del segundo y también por debajo del 6,1 % registrado entre enero y marzo.
La Agencia Tributaria considera grandes empresas a las personas físicas o jurídicas cuyo volumen de operaciones haya excedido la cifra de 6,01 millones de euros durante el año natural analizado. En total, suponen algo menos del 1 % de declarantes por IVA, pero su peso en la facturación del total de empresas es superior al 60 %.
Es cierto que en diciembre, el ritmo de subida se aceleró al 3,2 %, desde el 1,8 % de noviembre, pero la tasa trimestral evidencia el golpe de la crisis sobre la actividad. La desaceleración se notó tanto en lo que las compañías que venden en España, como en las que exportan. En concreto, las operaciones interiores apenas crecieron un 2,3 %, el trimestre más flojo de todo el año. Y las ventas fuera de nuestras fronteras se incrementaron un 5,8 %, un dato muy inferior al doble dígito que la referencia marcó en el resto de trimestres.
Pese a ello, el buen comportamiento en la primera parte del año propició en que, en el conjunto del ejercicio, las ventas totales subiesen un 5,9 %, gracias al tirón exportador, con un notable crecimiento del 9,6 %. Eso logró compensar el menor impacto de las ventas interiores, que apenas crecieron un 4,7 % con el lastre que supuso el componente de la construcción, que se hundió un 8,5 %. Más brusca fue la evolución de las importaciones, que cayeron un 6,3 % entre octubre y diciembre, frente al crecimiento del 5 % experimentado al comienzo del ejercicio. Ese desplome en el último trimestre se tradujo en que, en todo el 2022, las importaciones apenas crecieron un 1,7 %, desde el 10 % experimentado en el 2021.
En resumen, las ventas siguieron creciendo, pero a un ritmo mucho más lento en un año marcado por las consecuencias económicas de la guerra y las subidas de precios.
Crecen plantillas y salarios
En este contexto, las estadísticas también desvelan que el número de empleados en las grandes empresas creció un 5,2 % interanual. El salario de estos trabajadores (medido como rendimiento bruto medio), se incrementó un 3,7 %. Aunque la cifra es inferior a la inflación media del 8,4 %, se trata de la mayor subida desde el 2008. Y también supera la media del 2,78 % de aumento en los salarios de convenio.