La junta general de socios aprobó hoy la ampliación de capital de la pesquera, que sigue su plan de búsqueda de un socio industrial
17 ene 2023 . Actualizado a las 16:48 h.Nueva Pescanova es una sociedad que va camino de cumplir ocho años (refundada tras la quiebra de la vieja Pescanova), y en este corto espacio de tiempo ha pasado lo suyo: desde una fuga masiva de accionistas, a una amenaza de quiebra, hasta que hace dos años Abanca, que entró con apenas un 5 % de participación, tomó las riendas del grupo, capitalizó una deuda de 540 millones -la entidad tenía el 80 % de una deuda concursal, arrastrada desde el 2014, que se elevaba a 643 millones de euros-; y se hizo con el 98 % de la compañía.
Ahora, el banco de Juan Carlos Escotet da un paso más en favor de garantizar la solidez de la pesquera. Tal y como estaba previsto en el orden del día, la junta general de socios de Nueva Pescanova aprobó hoy una inyección de 70 millones de euros por parte de su accionista mayoritario, que se se ha canalizado a través de una aportación de capital, lo que no implica cambios en la estructura accionarial del grupo, según informó el grupo pesquero quien, en un comunicado, explica esta aportación extraordinaria para «reforzar los fondos propios de la compañía y robustecer la ejecución de su plan estratégico».
Nueva Pescanova facturó 1.087 millones de euros en su último año fiscal, que va de abril a marzo del 2022. Las ventas crecieron un 21 % respecto al año anterior y están un 4,4 % por encima de las que la multinacional tenía antes de la pandemia. Crecieron en todas las divisiones, tanto al por mayor como en la venta minorista y en restauración. También mejoraron en todos sus destinos internacionales, sobre todo en países como Portugal, Francia, Grecia y EE.UU.
Nueva Pescanova está inmersa de la ejecución de su plan estratégico, que bautizó como «rumbo al valor» y que se extenderá hasta 2025. Con este, busca «afianzar su posición como referente en la comercialización de productos de mar, a partir de una estructura organizativa ágil y dinámica que se basa en el conocimiento y la experiencia del grupo en todas las actividades que constituyen la cadena de valor», tal y como explica en su último informe no financiero.
Entretanto, Abanca sigue buscando y escuchando ofertas para dar entrada a un socio industrial que lo acompañe en el crecimiento de la compañía. La entidad evita hablar de venta, ya que subraya su voluntad de permanecer en el accionariado.