Más de la mitad de los hogares de Galicia tienen difícil llegar a fin de mes, y el 70 % no pueden ahorrar
ECONOMÍA

La situación económica de las familias ha empeorado respecto al 2021, según la encuesta coyuntural del IGE
03 ene 2023 . Actualizado a las 19:07 h.Pintan bastos para muchas familias por la brecha que se ha abierto entre unos precios insólitamente altos y unos ingresos que no crecen en la misma proporción. El Instituto Galego de Estadística (IGE) lo puso ayer negro sobre blanco al publicar su última entrega de la encuesta coyuntural de hogares, correspondiente al último trimestre del 2022.
Entre las conclusiones del sondeo destaca que casi siete de cada diez hogares de la comunidad ven imposible ahorrar en los próximos tres meses, pese a que la mayoría de ellos sí creen muy posible que tengan que asumir desembolsos imprevistos a corto plazo.
El elevado porcentaje que se ha quedado sin margen económico para pensar en hacer hucha se explica fácilmente porque ¿cómo ahorrar cuándo a duras penas se llega a fin de mes?
Y es que, según la encuesta del IGE, más de la mitad de las familias (concretamente el 54,5 % del total preguntado) afirman llegar con dificultad o mucha dificultad a final de mes. De hecho, el porcentaje de quienes llegan con dificultad ha crecido en dos puntos respecto al mismo período del año pasado, mientras que el de los que lo hacen con mucha dificultad prácticamente no ha avanzado (subió un 0,05 %).
En el extremo contrario, es decir, los hogares sin problemas económicos que llegan con holgura o incluso con mucha facilidad a final de mes, el porcentaje ha descendido dos puntos respecto a hace un año, situándose en el 45,7 %.
Cambio de hábitos
Y no parece que la situación vaya a mejorar a corto plazo, porque el indicador de confianza del consumidor no anticipaba tras el verano optimismo alguno entre los hogares más vulnerables y con menores ingresos, que asumen que habrá que seguir apretándose el cinturón para ajustar gastos.
En este sentido, el IGE confirma que durante el año que acaba de concluir las familias han ido modificando sus hábitos de compra y que, como ya hicieran durante la última crisis, han vuelto a refugiarse en las marcas blancas y los productos de oferta para aliviar la presión en su cesta de la compra. Así lo hizo el 41 % de los hogares gallegos, mientras que el 46 % fue más allá, al reducir también otros gastos, como el transporte, la ropa o el calzado, para priorizar la cada vez más cara alimentación.