Alemania critica los precios astronómicos del gas que venden países amigos como Estados Unidos

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

CLEMENS BILAN | EFE

Su ministro de Economía sugiere que los países de la UE deberían cooperar para hacer compras conjuntas y abaratar tarifas

05 oct 2022 . Actualizado a las 14:53 h.

El vicecanciller y ministro alemán de Economía y Acción Climática, Robert Habeck, ha lamentado que algunos proveedores de energía, incluyendo países «aliados» como Estados Unidos, apliquen precios «astronómicos» al suministro de gas dirigido a la Unión Europea, principal afectado por la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania.

«Algunos países, incluidos los amigos, a veces alcanzan precios astronómicos», critica el político germano en una entrevista publicada por el rotativo Neue Osnabruecker Zeitung (NIZ), donde afirma que «eso trae consigo problemas de los que hay que hablar», incluyendo la interlocución de la Comisión Europea con estos proveedores, según recoge Europa Press. 

En el caso de Estados Unidos, Habeck recuerda que Washington se puso en contacto después de que los precios del petróleo se disparasen y fuera necesario recurrir a las reservas nacionales de crudo en Europa. «Creo que esa solidaridad también sería buena para frenar los precios del gas», apunta.

La presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, confirmó este miércoles que «está abierta a debatir» posibles soluciones para rebajar las tarifas del gas importado, incluida la de imponer un techo al precio de todas las compras de hidrocarburo, una medida que no es de su agrado por los problemas que podría acarrear para el suministro de gas a Alemania. La ministra española para la Transición Ecológica,Teresa Ribera, aplaudió este cambio de postura que todavía está por concretar en una propuesta que podría llevarse a la cumbre de líderes de la UE en Praga este jueves y viernes. 

Compras conjuntas

En cuanto al papel a desempeñar por Bruselas, Habeck considera que Europa debería aunar su poder de mercado y «orquestar un comportamiento de compra inteligente y sincronizado por parte de los estados de la UE» evitando que los países compitan entre sí y eleven los precios del mercado mundial. El poder de mercado europeo es «enorme», solo hay que aprovecharlo, defiende.