Así se repartirá el dinero de los españoles en el 2023

Cristina Porteiro
C. Porteiro REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

A. Pérez Meca | EUROPAPRESS

Las pensiones absorberán cuatro de cada diez euros del Presupuesto

05 oct 2022 . Actualizado a las 08:17 h.

Cuatro de cada diez euros recaudados en el 2023 provendrá de las rentas de los trabajadores (IRPF) —un 7,7 % más que en el 2022— y se irán directamente al bolsillo de los pensionistas. Así consta en el proyecto presupuestario que ha elaborado el Gobierno de Pedro Sánchez para el año que viene y que este martes presentó la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendiendo «las cuentas de la mayoría social española frente al sálvese quien pueda de la derecha».

El Ejecutivo prevé un gasto récord de 455.978 millones. De ese pastel, la partida para pagar pensiones se comerá 190.687 millones, un 11,4 % más que hace solo un año. ¿Por qué? Por la revalorización de las prestaciones con el índice de precios al consumo (IPC), el aumento del número de jubilados y la cuantía media de los perceptores.

Un pensionista medio gallego, por ejemplo, pasará a ingresar 1.253 euros más (en catorce pagas) en el 2023 si, como prevé Montero, la inflación media del año a cierre de noviembre se sitúa en el 8,5 %. La capacidad adquisitiva de 10 millones de pensionistas está garantizada. No solo eso. El Gobierno también prevé canalizar a la hucha de las pensiones 2.957 millones de euros —por primera vez en 13 años— subiendo las cotizaciones de los trabajadores un 0,6 %. Un mecanismo de trasvase que ha sido cuestionado por Bruselas por cuanto no es suficiente para poder garantizar la sostenibilidad del sistema en la próxima década.

dependencia

Aumentan los fondos. Para la población dependiente (1,4 millones de personas, 69.079 de ellas en Galicia en el último año) también habrá más fondos. El Gobierno aumentará la dotación en 620 millones, hasta los 3.522. La subida acumulada desde que arrancó la legislatura es del 150 %.

desempleo

Cobro del 60 % de la base reguladora. El volumen total de fondos dedicados al desempleo se reducirá un 5,3 %, hasta los 21.278 millones de euros. Y esto es así porque el Gobierno anticipa que habrá menos gente parada —bajarán del umbral del 12 %—. De hecho, la prestación mejorará para unas 300.000 personas, según confirmó hoy la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quien ha anunciado que quienes cobren esta prestación pasarán a percibir el 60 % de la base reguladora, en lugar del 50 % actual.

empleo público

Locomotora del crecimiento. El Gobierno espera que a finales del año que viene haya casi 21 millones de personas ocupadas. El secreto: más empleo público. «El sector público actúa como locomotora para generar empleo y para sentar la base de una España más competitiva. No es un lastre al crecimiento, aunque algunos se empeñan en ello», defendió Montero. Habrá más oferta pública —además de la ya pactada subida salarial—. En esta legislatura ya se crearon más de 143.800 plazas nuevas de funcionarios.

recaudación

Un 7,7 % vía impuestos. La cuestión clave es, ¿cómo se sufragan los Presupuestos más expansivos de la historia? Porque esas cuentas también incluyen rebajas en el IRPF a quienes ganen menos de 21.000 euros brutos al año, el aumento del gravamen sobre los ahorros de más de 200.000 euros, la rebaja de la presión fiscal a los autónomos y la bajada del impuesto de sociedades del 25 al 23 % para pymes que facturen menos de un millón de euros.

El Gobierno confía en el buen estado de salud del mercado laboral y en el revulsivo de los 30.000 millones de euros que llegarán de la Unión Europea. Ese clima de dinamismo debería traducirse en un aumento de la recaudación del 7,7 % (hasta los 262.781 millones), vía impuestos, permitiendo reducir el déficit al 3,9 % del PIB, desde el 5 % de este año. Una estimación de difícil encaje, teniendo en cuenta que el crecimiento económico se irá enfriando del 4,4 % del PIB en el 2022 al 2,1 % en el 2023, según estimaciones del propio Ejecutivo. España ya acumula cinco meses consecutivos de desaceleración del empleo. A todo ello se suma que el 2022 está siendo un año excepcionalmente prolífico para las arcas públicas. La inflación, desbocada, ha elevado casi un 20 % la recaudación del Estado en los ocho primeros meses del año —a través del IVA y el IRPF, fundamentalmente—. Pero esos ingresos extraordinarios deberían reducirse a medida que la demanda y los precios vayan bajando. A pesar de todo, el Gobierno está seguro de que la recaudación a través del IVA —impuesto que se paga cada vez que compramos— se disparará un 5,9 %, hasta los 86.093 millones de euros.

La recaudación aumentará un 7,7 % a través de las rentas de los trabajadores, en la misma medida que el impuesto de sociedades, que aportará 28.519 millones en ingresos para el total del año. Las compañías siguen desembolsando en términos absolutos casi cuatro veces menos que los trabajadores a través de este gravamen.

En las cuentas, eso sí, el Gobierno no incluye el dinero que ingresará por el «impuesto solidario» sobre las grandes fortunas de más de 3 millones y con el que espera recaudar apenas 1.500 millones en dos años. Debe tramitarlo al margen de los Presupuestos.

reforma fiscal

Aplazada. Ni la reforma tributaria comprometida con Bruselas —debe estar lista en el primer trimestre del 2023— ni la estrategia fiscal que exige desde hace tiempo la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) para garantizar la sostenibilidad de las cuentas públicas han visto la luz en lo que va de año. ¿Cuál es el riesgo? Según apunta la AIReF, que el Gobierno central y las autonomías aprovechen la suspensión de las normas europeas de disciplina fiscal para financiar incrementos de gasto estructurales o que abran vías a la recaudación bajando impuestos en pleno año electoral.

La asignación para la Casa del Rey se congela: recibirá 8,4 millones

La Casa del Rey tiene consignados 8,4 millones de euros en los Presupuestos del Estado para el 2023, según la información divulgada por el Ministerio de Hacienda. Esto supone congelar su dotación porque tanto en el 2022 como en el 2021, esa asignación alcanzó el mismo umbral de 8,4 millones.

En los ejercicios del 2019 y 2020, la Casa del Rey manejó un presupuesto procedente de las cuentas públicas de 7,8 millones de euros.

Según los datos publicados en la página web de la Casa Real, los miembros de la Familia Real cobran de ese presupuesto algo más de medio millón de euros.

En su conjunto, casi el 54 % del total de la asignación con cargo a los Presupuestos se dedica a gastos de personal y el 32 %, a gastos corrientes en bienes y servicios.

El gasto en defensa crecerá un 25,8 % y se llevará más de 12.000 millones de los Presupuestos

El gasto en defensa se convirtió en su momento en una más de las grandes grietas entre los socios del Gobierno de coalición. Y parece que, finalmente, la balanza ha caído del lado socialista. Y es que, a pesar del rechazo frontal que mostraron desde el principio en Unidas Podemos ante un posible incremento de esa partida, el anteproyecto de cuentas públicas refleja un aumento del 25,8 %. Pasará de 9.791 millones de euros a 12.317. Eso teniendo en cuenta los 4.900 millones que el Ejecutivo destinará a los planes especiales de armamento, que no computan en el límite de gasto no financiero.

Si se hace un cálculo del mordisco que se llevará el ministerio que capitanea Margarita Robles excluyendo estos planes especiales, ese capítulo solo crece un 6,5 % con respecto al del año en curso.

En las primeras reuniones celebradas ya en el mes de agosto para comenzar a confeccionar las cuentas públicas del próximo año, los morados se plantaron y dejaron bien claro que no aceptarían un aumento, mientras que los socialistas expusieron que era necesario, sí o sí, para poder cumplir con el compromiso adquirido por Pedro Sánchez, tanto con la OTAN como con sus socios europeos, referente a que ese capítulo ha de llegar al equivalente al 2 % del PIB en el 2029.

Un aumento de al menos un 2,5 % en el sueldo de los funcionarios

El texto que recogerá el detalle de las cuentas públicas deberá incluir parte del pacto que alcanzaron este lunes representantes de los trabajadores de la función pública y el Gobierno en materia salarial. Es decir, el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado del año 2023 recogerá la subida que experimentarán los salarios de los funcionarios el año próximo. Pero no toda la pactada (que asciende al 9,5 % a lo largo de tres ejercicios).

Con las cuentas públicas que el Ministerio de Hacienda prevé aprobar en las próximas semanas se hará finalmente efectiva la subida de la retribución pactada para los empleados públicos. Será, al menos, de un 2,5 %. Es el porcentaje que tienen asegurado. Y puede ser mayor. Hasta un 1 % más, en función de cómo vayan las cosas, según lo acordado con CC.OO. y UGT. Se podrá incrementar un 0,5 % adicional si la suma del IPC armonizado del 2022 y la cifra que deje el adelantado de septiembre del año que viene supera el 6 %. La otra variable, también del 0,5 %, se aplicará si el PIB nominal iguala o supera al estimado en el cuadro macroeconómico que acompaña a los Presupuestos del 2023.

En total, el Gobierno destinará 20.502 millones de euros a las nóminas de los empleados públicos.