C. P.
La inflación en España cabalga a un ritmo frenético. La cesta de la compra se ha encarecido un 10,8 % respecto a hace un año, según el dato adelantado del Instituto Nacional de Estadística (INE). Y aunque son los precios de la electricidad, los carburantes y las materias primas los principales responsables de impulsar al alza el índice de precios al consumo (IPC), lo cierto es que esas subidas también han prendido la mecha de otros productos intermedios y finales, los que compramos en el supermercado.
Según un artículo publicado este miércoles por el Banco de España, un 93 % de las categorías de alimentos en la zona euro «han registrado tasas extremadamente elevadas en términos históricos» hasta el mes de junio, frente a los picos del 27 y el 54 % que se registraron en los años 2001-2002 y 2007-2008, respectivamente. Nunca antes la inflación se había extendido tanto y con tanta velocidad. «Los incrementos de precios están siendo muy generalizados e intensos para todos ellos en el área del euro», señalan los autores del informe.