El indicador cierra mayo con una media cercana al 0,29 %, casi ocho décimas más que hace un año
01 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Durante seis años el euríbor a doce meses ha marcado valores negativos. Sin embargo, este indicador, con el que se calcula el coste de las hipotecas de tipo variable, se ha disparado en mayo hasta marcar este lunes una tasa diaria del 0,39 % y una media mensual provisional del 0,287 %, lo que supone 27 puntos básicos más que en abril (0,013 %) y 76 puntos más que hace un año (-0,481 %) debido al endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, que ha subido los tipos de interés para contener la inflación.
En España alrededor de cuatro millones de hipotecas están firmadas a tipo variable referenciadas al euríbor, lo que supondrá un encarecimiento de 600 euros de media al año. Y es que desde el pasado 12 de abril, cuando el indicador cotizó en positivo por primera vez desde febrero del 2016, no ha parado de repuntar, lo que significa incrementar las cuotas. En concreto, en una hipoteca media de 150.000 euros a 20 años con un diferencial del 1 % sobre el euríbor que se revise ahora la cuota pasará de 658 euros a 708 euros, 613 euros más al año.
Y todo pinta que irá a peor. El Banco Central Europeo (BCE) ya ha anunciado que seguirá los pasos de la Fed y empezará a subir el precio del dinero en julio. Su presidenta, Christine Lagarde, señaló recientemente que la reunión del consejo de gobierno en julio será el momento oportuno para acometer la primera subida de tipos de interés de la eurozona en más de una década. Así, el organismo dejará atrás las tasas negativas para finales del tercer trimestre. Fue el anuncio del fin de la política ultraexpansiva del BCE lo que cambió la tendencia bajista del euríbor, que en diciembre del 2021 registraba su mínimo histórico en el -0,502 %. Por ello, todo hace prever que la subida de tipos de julio hará que este índice siga subiendo durante todo el año.
Más fijas que variables
El departamento de Análisis de Bankinter estima que el indicador cerrará el año en el 0,4 % y el que viene en el 0,8 %, mientras que los analistas de CaixaBank apuntan que podría llegar al 1 % el próximo año. Por ello, los expertos de HelpMyCash aseguran que cambiar una hipoteca fija a una variable en este momento «es un desacierto» y solo resulta conveniente para clientes que pidan un préstamo a muy corto plazo o que sepan que pueden cancelarlo pronto.
Pese al incremento de la cuota, el director de Hipotecas de iAhorro, Simone Colombelli, señaló que quienes tenían un préstamo a tipo variable se han beneficiado durante todo un año de un euríbor muy bajo, que ahora vuelve a su terreno más habitual. «Lo que han vivido en el 2021 ha sido una situación excepcional, han gozado de unas buenas condiciones, y lo que están viviendo ahora tampoco es catastrófico, si siguen alrededor del 1 % es muy bueno en comparación con lo vivido hace años», dice.
Los datos del INE reflejan que casi el 73 % de las hipotecas que se constituyeron en marzo se firmaron a tipo fijo, lo que reducirá el impacto de las subidas del euríbor.