Los españoles destinan casi el 40 % del salario a pagar impuestos

La Voz REDACCIÓN

ECONOMÍA

PACO RODRÍGUEZ

A pesar de que la presión fiscal es menor que la media de la UE, son casi cinco puntos más que el conjunto de la OCDE

24 may 2022 . Actualizado a las 15:28 h.

¿Pagan los españoles un volumen de impuestos razonables? Pues depende del destino de esos fondos y qué cobertura o servicios públicos preste el Estado a cambio. Pero lo cierto es que la presión fiscal que soportan los contribuyentes en España es cinco puntos más alta que la media de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), según el informe Taxing Wages publicado por esta organización y recogido por Europa Press. 

Las Administraciones públicas recaudaron el 39,3% del salario de los trabajadores españoles en concepto de impuestos y cotizaciones a la Seguridad Social en el año 2021, frente al 34,6 % de la media de la OCDE, donde la presión tributaria sobre los salarios ha bajado ligeramente desde el 2020, el año en el que estalló la pandemia. En España, sin embargo, se observó un aumento.  

En concreto, el IRPF pesó un 11,3 % sobre el salario en España, frente al 13 % de la media de la OCDE. Por su parte, las cotizaciones sociales pagadas por las empresas supusieron el 23 % y las abonadas por los trabajadores, un 4,9 %, cuando el promedio de los miembros de la organización se situó en el 13,5 % y el 8,2 %, respectivamente.

Así, España se mantuvo en el decimosexto puesto de los países con mayor presión tributaria de la OCDE, en una lista encabezada por Bélgica, donde a los trabajadores se les retiene el 52,6 % de su salario. Los belgas son los únicos que deben transferir a la Administración y la Seguridad Social una suma mayor de su salario de la que ellos reciben en neto.

Por detrás de Bélgica, los países con mayor diferencia entre salario bruto y neto son todos europeos: Alemania, donde se retiene el 48,1 %, Austria (47,8 %), Francia (47 %), Italia (46,5 %), Eslovenia (43,6 %), Hungría (43,2 %), Finlandia (42,7 %), Suecia (42,6 %), Portugal (41,8 %), Eslovaquia (41,3 %), Letonia (40,5 %) y Luxemburgo (40,2 %). España conserva una presión fiscal menor que la media de la Unión Europea (UE). 

Por contra, los países de la OCDE con cuñas fiscales más bajas en el 2021 fueron Colombia (0 %), Chile (7 %), Nueva Zelanda (19,4 %), México (19,6 %), Suiza (22,8 %), Corea del Sur (23,6 %), Israel (24,2 %), Australia (27,1 %), Estados Unidos (28,4 %) y Costa Rica (29,2 %).

«La cuña fiscal aumentó en 24 de los 38 países de la OCDE, disminuyó en 12 y se mantuvo sin cambios en dos», explicó la organización, añadiendo que se observaron aumentos superiores al punto porcentual en Israel (1,02), Estados Unidos (1,2) y Finlandia (1,33).

«En casi todos los países donde aumentó la cuña fiscal para el trabajador soltero, el incremento fue impulsado por un IRPF más alto», añadió la OCDE, lo que, en algunos países, fue el resultado de salarios promedio más altos que interactúan con sistemas progresivos de impuestos sobre la renta, mientras que en otros casos fue impulsado por una mayor proporción de ganancias sujetas a impuestos a medida que el valor de las desgravaciones fiscales y los créditos fiscales cayeron en relación con el salario promedio.