El magnate ofreció 40.000 millones de euros para hacerse con el control de la red social
17 abr 2022 . Actualizado a las 19:50 h.Twitter se resiste. La red social del pajarito no quiere ceder ante la ofensiva multimillonaria de Elon Musk. El hombre más rico del mundo anunció este jueves su intención de comprar la empresa con una oferta de 40.000 millones de euros, «la mejor y última que puedo ofrecer», aseguró a la cúpula de la compañía, que ha respondido este viernes a su propuesta desplegando escudos defensivos.
Su junta directiva ha aprobado por unanimidad un plan para hacer más difícil la operación de compra al propietario de Tesla. Según ha revelado el Financial Times, dicho plan consistiría en permitir a los accionistas que compren acciones adicionales con descuento en un monto similar al que ya tienen. Esta maniobra, a la que denominan «pastilla venenosa», se puede activar cuando un grupo o inversor particular adquiere más del 15 % de las acciones de la empresa en una operación que no cuente con la aprobación de la junta.
Musk tendría que subir su apuesta, hoy en 54,20 dólares por acción, si continuara interesado en tomar el control de Twitter, a cuyo accionariado entró hace poco más de una semana, tras desembolsar 2.900 millones de dólares. Con esa transacción logró concentrar el 9,2 % de las acciones de la firma cuyo mayor accionista sigue siendo el grupo Vanguard (10,3 % del capital).
El empresario de origen sudafricano explicó en sus comunicaciones a la dirección de la compañía que tenía la intención de hacerse con el 100 % de la firma para privatizarla y sacarla de la bolsa. De hecho, el propio Musk coquetea desde hace tiempo con la idea de fundar su propia red social de código abierto para «promover la libertad de expresión» en todo el mundo, una misión que no cree que se pueda conseguir con su actual gerencia.
Como medida de presión, el magnate sugirió que podría vender de inmediato su participación (9,2 %), hundiendo la cotización de la compañía en la bolsa.
