El ritmo al que se está encareciendo el combustible también ha dejado paralizada a parte de la flota pesquera. Algunos barcos, como los cerqueros de Vigo, han optado por prolongar el descanso que suelen hacer en los primeros meses del año. Buques de Gran Sol han decidido alargar el paréntesis entre marea y marea. Y hay arrastreros que ya hace semanas que han eliminado todos los viernes de su calendario de días laborables... Pero los gritos pidiendo auxilio llegan de todos los segmentos de flota. «O se toman medidas urgentes, o la mayor parte de los barcos acabarán amarrando», apuntan desde el Puerto de Vigo.
Desde que empezó el año, el gasto en combustible de las empresas pesqueras se ha duplicado —el gasoil se paga por encima del euro, un 107 % más que el 1 de enero— y ese mayor coste no se puede repercutir sobre el precio del producto, dado que este se fija en la subasta en la lonja. Así que, de seguir así, no compensará salir al mar, habrá menos pescado fresco en el mercado y subirán los precios. El congelado podrá ser un refugio, pero, sin duda, a un mayor precio, ya que la flota congeladora está metida en una espiral alcista todavía más acusada, puesto que, además del encarecimiento del combustible, también debe hacer frente a las subidas de logística y almacenamiento. «Enviar las capturas de la flota congeladora es mucho más caro [un contenedor ha pasado de costar 3.000 euros a más de 8.000] y el coste del almacenamiento en frigorífico también», apunta Javier Touza, presidente de Arvi.
Información elaborada por M. Mora, M. Sío Dopeso, E. Abuín, M. Cedrón, A. Balseiro, F. Fernández y G. Lemos
S. Cabrero
La guerra en Ucrania llega en el peor momento posible. Con una sociedad todavía sanando las heridas de la pandemia y con una recuperación aún dando sus primeros pasos, el conflicto traerá consigo una nueva época de vacas flacas. Y Galicia no será una excepción. Familias y empresas tendrán que afrontar un escenario tormentoso para el que no estaban preparados.
—¿Galicia está preparada para asumir las consecuencias del conflicto y de las sanciones?
—Ningún país o región estaba preparado para las consecuencias que está suponiendo esta invasión de Ucrania. Galicia es una región con una alta capacidad exportadora, pero también necesitada de materias primas para producir y deficitaria energéticamente. Además, nuestro tejido industrial también requiere factores que se importan. El problema no son solo los efectos económicos de la guerra, sino también las actuaciones derivadas de las sanciones, y lo peor es que ha venido tras pasar una pandemia mundial, estando en grave peligro la recuperación.
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