Abanca y la Xunta instalarán cajeros en 39 municipios rurales sin oficinas

Olimpio Pelayo Arca Camba
o. p. arca SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Sandra Alonso

La entidad duplicó el año pasado su beneficio, hasta los 323 millones

03 feb 2022 . Actualizado a las 17:36 h.

La atención a las personas mayores es «tremendamente relevante para Abanca». Así de contundente se mostró este miércoles el consejero delegado del banco gallego, Francisco Botas, en la presentación de los resultados de la entidad. Por ese motivo precisamente, y pese a «ser conscientes del momento de transformación digital» en el que está inmerso el sector, Abanca ha adoptado una serie de medidas para reforzar el servicio a los clientes con edades más avanzadas. Entre ellas, la ampliación de los horarios de oficina durante los primeros y los últimos días del mes.

Explicó también Botas que Abanca «ha decidido mantenerse en más de 124 municipios en Galicia en los que permanece como única entidad. A ellos hay que sumar otros diez atendidos a través de oficinas móviles». «En esos 134, solo en 17 existen oficinas de Correos, por ejemplo», abundó, para aclarar que, de esas 124 sucursales, 54 no soportan los costes. Es decir, no son rentable.

«Algo estaremos haciendo bien cuando más del 30 % de los clientes son mayores de 65 años; y en Galicia, más del 65 % de los mayores de 65 años, cerca de 460.000 personas, son clientes de Abanca», añadió, por su parte, el presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet. En ese mismo contexto, se refirió al concurso impulsado por la Xunta y del que ha resultado adjudicataria la entidad que pilota para instalar cajeros automáticos en 39 ayuntamientos que actualmente carecen de ellos. Una operación que, aclaró Escotet, no supondrá «ningún tipo de beneficio económico» para el banco. La instalación de los cajeros empezará ya este mes.

Hicieron repaso ambos directivos a los números cosechados por Abanca en el 2021, «un año muy retador», según Escotet, pero con «un balance francamente bueno». «Hemos salido reforzados de la crisis», afirmó. Un ejercicio en el que el banco logró 323 millones de euros de beneficios, duplicando los 160 del 2020.

Un resultado basado en el aumento de ingresos recurrentes, con un avance del 6,2 % en el margen básico, junto con medidas de control de gastos y realización de sinergias que permitieron mejorar el margen recurrente un 33,1 %, hasta los 241 millones. Cifras que recogen los frutos de su política de integraciones (el pasado año sumó a Bankoa y Novo Banco), reflejados en el incremento del negocio (un 57 % más respecto al 2018) y de rentabilidad (aumentan un 26,3 % los ingresos). El volumen de negocio superó los 108.000 millones, con un crecimiento interanual del 18,8 %, y una actividad que recuperó niveles previos a la crisis, con un 40,9 % más de hipotecas rubricadas respecto al 2019 (de 760 a 1.071 millones) y 2.422 millones de crédito formalizado con pymes y autónomos, un 9,5 % más; las suscripciones netas de fondos de inversión se triplicaron (1.313 millones frente a 471 en el 2019).

En Portugal, país especialmente estratégico para Abanca, la evolución fue también positiva: las previsiones realizadas para el ejercicio se superaron, con una formalización de hipotecas un 58 % por encima del objetivo, y un 26 % más en las formalizaciones fuera de balance.

Los responsables de Abanca ofrecieron cifras para apuntar la solidez de la entidad: un 85,3 % de cobertura de activos dudosos, una ratio de morosidad del 2,1 % y 1.527 millones de capital sobre requisitos. Con esos mimbres, las agencias de rating mejoraron la calificación de Abanca en el 2021 (avanzó un escalón en Moody’s), que disfruta del «grado de inversión».

Tanto Escotet como Botas subrayaron que, pese al vencimiento de más del 95 % de moratorias concedidas por la pandemia, solo en torno al 2,5 % se ha convertido en mora.

La entidad gestiona 62.699 millones de recursos de clientes, con un incremento cercano al 20 % el pasado año (10,6 % si se excluyen Bankoa y Novo Banco), mientras que los depósitos alcanzan los 49.793 millones (17 % más). Los préstamos y anticipos a la clientela se situaron en 45.982 millones. Los seguros generales de marca propia implicaron un significativo crecimiento de ventas: 33.800 pólizas desde el lanzamiento en marzo. La banca móvil superó por primera vez el millón de usuarios.

Sobre la posibilidad de nuevas absorciones, Escotet recordó que en los últimos años Abanca ha realizado seis integraciones «y seguimos abiertos y muy atentos a lo que ocurre en el mercado», para un crecimiento básicamente en la península Ibérica:

Ibercaja, «complementaria»

Preguntado por una posible operación con Ibercaja, si esta finalmente no sale a bolsa y explora fusiones, Escotet evitó especular. Eso sí, admitió que en esa revisión de cualquier oportunidad que pudiera resultar complementaria a la estrategia de Abanca, encajaría Ibercaja