Como no fue suficiente para paliar la sangría bursátil, decidieron tirar otra vez de publicidad para salir airosos del escándalo. Tal y como desveló la periodista Almudena Ariza en un hilo de Twitter, los responsables crearon en solo dos días un anuncio parodiando toda la historia y asegurando que en realidad Mr. Big había fingido su muerte para marcharse con su instructora de spinning. Golpe de efecto que tiñó otra vez de verde la cotización de las acciones de la firma. Poco duró la alegría. El pasado 17 de diciembre, el periódico The Hollywood Reporter desveló que dos mujeres habían acusado al actor Chris North de abusos sexuales. Y el escándalo vuelve a cebarse con Peloton. Preocupadas por la crisis que puede traer consigo la noticia, la firma ha optado por regresar a la casilla de salida y borrar todo rastro del anuncio. Habrá que ver si, como reza el refranero popular, es peor el remedio que la enfermedad.