Las acciones de Inditex cayeron este martes un 6,1 % y cerraron la jornada en 27,86 euros

Cristina Porteiro
C. Porteiro REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Altea Tejido | Efe

A pesar del tropiezo bursátil, los inversores que compraron los títulos y no los han vendido acumulan una plusvalía de 9.476 euros por cada 1.000 invertidos

30 nov 2021 . Actualizado a las 23:59 h.

El relevo en la cúpula de Inditex, más prematuro de lo que algunos esperaban, cogió este martes con el pie cambiado a muchos inversores que, con su tradicional aversión a los cambios, reaccionaron desprendiéndose de parte de la cartera de acciones del grupo. Su valor retrocedió este martes un 6,10 %, arrastrando consigo al Ibex 35, que cerró la sesión en terreno negativo.

El selectivo retrocedió un 1,78 %, influido también por la incertidumbre sobre los potenciales efectos que podría tener la nueva variante sudafricana del covid sobre la economía. Tanto es así, que los valores vinculados a la movilidad, como IAG (-3,32 %), y el turismo, como Meliá Hoteles (-3,67 %) acompañaron en las pérdidas a Inditex.

El resto de parqués europeos también sufrieron caídas, poniendo el broche a un mal mes para la bolsas, especialmente la española, que se ha dejado un 8,3 % de su valor en estos 30 días.

A pesar de la caída de este martes, que supone una pérdida del entorno de los 5.300 millones de euros, las acciones de Inditex se han revalorizado un 9,5 % en lo que va de año. Su precio actual (27,86 euros) sigue por encima de los niveles de principios del 2021 y del 2020, aguantando el pulso en la carrera de obstáculos que arrancó con la pandemia, y no tan lejos del listón de los 30 euros, en cuyo entorno se ha movido el precio de la acción de Inditex en los años de la recuperación económica.

Primero la expansión internacional y después los planes de digitalización de la compañía han impulsado su valor en el mercado. Cuando la firma salió a bolsa, apenas se pagaban 2,94 euros por acción. Un valor que casi se triplicó en el primer año de estreno.

En solo una década, el precio se multiplicó por cinco, reflejo del interés inversor en una de las compañías más estables y robustas de España.

Fuerte en las crisis

Ni siquiera la gran recesión, que obligó a España a pedir un rescate bancario y se llevó por delante a importantes compañías, le pasó factura. El capital apostó por Inditex para protegerse ante posibles pérdidas y esa confianza tuvo sus frutos porque a mediados del 2017, las acciones del grupo rozaron el cielo, superando los 36 euros.

A pesar del ajuste bursátil de este martes, los inversores de Inditex ya acumulan a estas alturas retornos de hasta 9.400 euros por cada 1.000 invertidos en la multinacional gallega desde que empezó a cotizar.