Sandra Ortega quiere deshacerse de Room Mate y en el mercado se da por hecho la venta por un euro

Sofía Vázquez
Sofía Vázquez REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

GUSTAVO RIVAS

Se diseña una operación «distressed», por la que se compran activos con grandes problemas de solvencia a precios de derribo para posteriormente venderlos rentabilizando lo invertido

06 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Sandra Ortega quiere deshacerse de la participación que, a través de Rosp Corunna, tiene en Room Mate y que se sitúa en el entorno del 30 % del capital. Su intención de vender fue dada a conocer por la empresaria tras la salida en noviembre pasado de Jose Leyte -el que fue su mano derecha en la patrimonial- y volvió a ser confirmada ayer.

La venta no es sencilla, ya que está condicionada por el conflicto que se abrió después de que la empresaria se querellase contra Leyte, al que le acusa de falsificar su firma en varias cartas de garantía para que le concediesen créditos al grupo hotelero que dirige Kike Sarasola. Adquirió así la empresaria una doble condición en Room Mate: avalista y acreedora de más de 26 millones de euros.

En este contexto, ayer en el mercado se daba por hecho que Rosp Corunna negocia por un euro la venta de las acciones al fondo TPG (Texas Pacific Group), vinculado con la firma española Ithaka Partners. El Confidencial explicó que se diseña una operación distressed: se compran activos con graves problemas de solvencia a precios de derribo para posteriormente venderlos rentabilizando lo invertido. Rosp Corunna evitó realizar cualquier tipo de declaración que desmintiera o confirmara la noticia. 

Esta no es la primera vez que TPG intenta realizar una compra en Galicia. En el 2019 se hizo por 170 millones con la planta de Ferroatlántica de Cee-Dumbría y las centrales asociadas, propiedad hasta ese momento del grupo Villar Mir.