El ministro admitió que el ritmo de reactivación de estos trabajadores se ha ralentizado y dejó entrever que las fuertes exoneraciones a la Seguridad Social con que se premia ahora la reactivación no son primordiales. «El énfasis que hemos puesto en incentivos a la activación creo que en este caso no es un elemento central en la negociación», explicó Escrivá, que puso el foco en «formarles bien durante el tiempo que continúen en ERTE para que su reincorporación se haga con unas cualificaciones distintas».