El grueso del ajuste de plantilla se llevará a cabo mediante prejubilaciones y bajas anticipadas
02 sep 2021 . Actualizado a las 19:11 h.Banco Sabadell ya ha puesto sobre la mesa las primeras cifras del que será un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) en el sector financiero. La entidad ha planteado a los sindicatos la salida de hasta 1.900 trabajadores del grupo, lo que representaría un 12,5 % del total de unas 15.000 personas que conforman su plantilla hasta mediados de este año, 413 de ellos en Galicia. El número de empleados afectados por el ERE superaría al del anterior proceso que ya llevó a cabo el Sabadell el año pasado, y que se saldó con la salida de 1.800 trabajadores. El grupo considera que aquel proceso no fue suficiente para acometer sus objetivos de rentabilidad, reducción de gastos y adaptación de la red de oficinas. Se desconoce aún cuántas de esas bajas se producirán en Galicia, pese a que ayer circulaban algunas cifras que apuntaban a algo más de medio centenar de trabajadores afectados.
En cualquier caso, el banco ha planteado a los sindicatos en la primera reunión su intención de que todas las salidas sean voluntarias, aunque esta circunstancia tendrá que adaptarse a los ajustes que tiene previsto hacer el grupo en su red de oficinas. Porque, según fuentes de la negociación, el 85 % de esas salidas del ERE del Sabadell provendrán de las sucursales. El resto, de otros servicios centrales y departamentos del grupo. En cualquiera de los casos, se trataría de un mecanismo de prejubilación (el grupo ha trasladado su interés en proteger a la plantilla con mayor dificultad de acceso al mercado laboral, es decir, aquella con entre 50 y 55 años), bajas incentivadas y un plan social de recolocación, que llevará a cabo Manpower, «muy por encima de los estándares de mercado».
Los cálculos de los sindicatos estiman que hay más de 2.000 trabajadores con una edad superior a los 55 años. Fuentes de la negociación indican que el acuerdo podría estar cerrado a finales de octubre, y que las salidas se materializarán a lo largo del primer trimestre de 2022.
CC.OO. y UGT han mostrado su rechazo a esta medida al considerar que en la entidad «no sobra nadie». En el caso de Comisiones, ha reclamado al banco el informe completo que debería justificar este ERE, ya que no tienen claros cuáles son los motivos que lo justifican.