Iberdrola y Endesa niegan que hayan sido avisadas por subir precios eléctricos

La Voz REDACCIÓN

ECONOMÍA

JUAN CARLOS HIDALGO

Competencia detectó que algunas empresas habían subido hasta un 30 % el término de energía

28 ago 2021 . Actualizado a las 10:00 h.

Tanto Iberdrola como Endesa se han apresurado en mandar comunicados para asegurar que las compañías que han colado subidas de precios aprovechando la implantación de los nuevos tramos horarios no son ellas, y que han seguido las instrucciones recibidas desde la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para su aplicación en la parte del recibo eléctrico correspondiente a los costes regulados.

Competencia anunció esta semana que había detectado empresas que habían subido hasta un 30 % el término de energía desde el 1 de junio, bien sin comunicarlo previamente a sus clientes, bien mintiéndoles diciendo que lo hacían obligadas por la CNMC, porque la aplicación del nuevo reparto de costes regulados en la factura implicaba ese incremento, lo cual no es cierto.

Iberdrola y Endesa resaltan que el regulador no se ha puesto en contacto con ellas para que regularicen nada, así que ellas no han sido las protagonistas del informe de Competencia.

Este organismo apuntó que había conminado a esas empresas -que no identificaba- a rectificar y a devolver lo cobrado de más, o de lo contrario serían sancionadas.

Las organizaciones de consumidores OCU y Facua exigieron conocer los nombres de las compañías infractoras y también que se les abra expediente sancionador para imponerles multas ejemplarizantes. Fuentes de la OCU explicaron que se trata de una infracción grave sancionable con multas de entre 600.000 y seis millones de euros. 

Vigilar los cambios

Competencia realizó un informe de seguimiento para ver cómo se había realizado la adaptación a los nuevos tramos horarios para calcular los costes regulados de la factura. Para ello solicitó información a las 25 comercializadoras con mayores cuotas de mercado sobre los precios facturados antes y después del 1 de junio, a una serie de clientes elegidos aleatoriamente. Ahí descubrió que la mayoría aplicó correctamente la nueva metodología, pero varias incrementaron el precio del término de energía escudándose en los cambios impuestos por el regulador.