Competencia sospecha que podría monopolizar el mercado e incrementar el precio de los anunciantes
03 ago 2021 . Actualizado a las 14:14 h.Los datos son el oro de la era digital. La encarnizada lucha por controlar la información que generan los consumidores en Internet ha llevado a Facebook a presentar una oferta para comprar Kustomer, la compañía estadounidense que comercializa un software especializado en servicios al cliente. Cada vez que su tecnología permite desplegar la lista de interacciones de un cliente con un anunciante, el historial de compras, reembolsos o quejas en cualquier plataforma online, genera una información valiosísima para quienes han hecho pivotar sus negocios traduciendo todos esos datos agregados en perfiles de comprador. Y Facebook no es la excepción.
La compañía de Mark Zuckerberg quiere apuntalar su posición dominante en el sector. Controla la información generada en los servicios de mensajería (Whatsapp, Messenger o Instagram), en la propia red social y domina el mercado de la publicidad online. Es tal la concentración de poder de la empresa que la Comisión Europea ha anunciado esta mañana que investigará en profundidad la propuesta de adquisición de Kustomer ante la sospecha de que podría dañar la competencia, crear barreras de entrada a competidores y aumentar el precio de los anunciantes al reducir las opciones disponibles. «Facebook disfruta de una posición de liderazgo tanto en la publicidad online como en los principales canales de mensajería. Nuestra investigación tiene como objetivo garantizar que la transacción no va a dañar a negocios o consumidores, y que cualquier dato al que Facebook tenga acceso no distorsionará la competencia», explicó este martes la comisaria del ramo, Margrethe Vestager.
Tras una investigación preliminar, Bruselas llegó a la conclusión de que hay razones para oponerse a la compra. En primer lugar porque la adquisición podría tener un impacto negativo en el propio mercado de software de atención al cliente. El dominio de Facebook podría levantar barreras a la entrada de terceros y al uso de este servicio crucial para las ventas por Internet. La multinacional «tiene la posibilidad» y «el potencial incentivo económico» de restringir el acceso, según los servicios de Competencia, que también teme que el acceso de Facebook a los datos de compra, perfiles y tendencias de los consumidores le otorgue una ventaja incuestionable en el mercado.
Las autoridades europeas tomarán una decisión antes del 22 de diciembre tras investigar «a fondo» la operación de compra.