Asociaciones acusan al Gobierno de trasladar a las familias el coste de las deficiencias del modelo energético

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Ramón Leiro

Sostienen que la nueva tarifa de la luz es injusta y regresiva porque las rentas altas no necesitarán cambiar de hábitos

04 jun 2021 . Actualizado a las 14:10 h.

Aluvión de críticas al Gobierno por el diseño de la nueva tarifa de la luz. Al malestar social generalizado se han sumado en las últimas horas plataformas de activistas como la Alianza contra la Pobreza Energética (APE) y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), quienes en una carta conjunta han denunciado que la nueva factura eléctrica por tramos puesta en marcha por el Gobierno es «un lobo con piel de cordero», al trasladar el coste de las deficiencias del modelo energético a las familias, recoge Efe. 

Ambas creen que es injusto que sean los consumidores quienes se hagan cargo de los sobrecostes y muestran su preocupación por el incremento de las facturas durante los próximos meses, además de los potenciales efectos que podría tener la subida para las familias más vulnerables.

Y es que el encarecimiento de la luz en las horas punta no perjudica a todos por igual. Las rentas altas y familias acomodadas pueden asumir la subida sin mayores problemas, así que no necesitarán cambiar sus hábitos, que es lo que busca el Gobierno. Por el contrario, las familias más humildes serán las que notarán más las subidas en sus facturas y las que se verán forzadas a cambiar de hábitos para llegar a final de mes. Por eso las asociaciones han criticado el diseño de la tarifa por tramos por ser injusta y regresiva. 

Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), lo que se hace con esta nueva factura eléctrica es penalizar el consumo doméstico en las horas con más demanda y distribuir más equilibradamente el consumo a lo largo de las 24 horas del día, con el objetivo de intentar desplazar la demanda a períodos donde la saturación de la red es menor y, de este modo, evitar aumentar las inversiones.

Para la APE, el incremento de estas facturas puede ser el golpe definitivo para las familias vulnerables que aún están protegidas por la moratoria estatal vigente hasta el 9 de agosto, haciendo que aumenten considerablemente sus deudas. Del mismo modo, temen que algunas familias que han ido pagando sus facturas de los últimos meses con apuros no puedan hacerlo a partir de ahora.

La CNMC, que reconoce que 3 de cada 4 hogares desconocían hace medio año la diferencia entre mercado libre y regulado, pide a las familias que desplacen al máximo su consumo fuera de horas punta. Algunos empiezan a caer en las trampas de los «precios estables» que están anunciando las eléctricas para atraer a algunos de los 11 millones de consumidores que permanecen en el mercado regulado. 

La mitad del consumo, en horas valle

Cálculos aparecidos en los últimos días y que recoge la carta de la APE, indican que para poder rebajar la factura debemos concentrar entre el 40 % y el 50 % de nuestro consumo en horas valle (por la noche o durante los fines de semana, algo complejo tratándose España del segundo país de toda la Unión Europea con mayor porcentaje de población residiendo en pisos, con un 64,6 %.

Consideran también que el Gobierno debería haber trabajado en reformas como el anteproyecto de ley para acabar con los beneficios caídos del cielo o la creación del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico, que prepara el ministerio de Teresa Ribera, antes que situar toda la responsabilidad en la ciudadanía de a pie.