Invertir con criterios responsables, una tendencia rentable venida para quedarse

Ana Balseiro
Ana balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

sede BBVA

La gestora del BBVA la defiende como uno de los ejes clave de su estrategia

25 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Es posible rentabilizar nuestros ahorros pese al actual escenario de tipos cero e incluso negativos? Por supuesto. Esa es la respuesta de los expertos en inversión, apuntando algunas de las tendencias que lo hacen posible y que han llegado para quedarse. La inversión socialmente responsable, la que pone el foco sobre los aspectos ambientales, sociales y de buen gobierno (ESG por sus siglas inglesas de Environmental, Social y Governance) no está en absoluto reñida con la rentabilidad y, lejos de ser una moda, está a la cabeza de esas tendencias con más brillantes perspectivas.

Así lo defienden desde BBVA Asset Management (AM). Luis Vadillo, director de negocio de la gestora del BBVA, explica que precisamente acaban de renovar su estrategia de inversión para ayudar a los clientes a «poner a trabajar sus ahorros» y la sostenibilidad es el primero de los cuatro pilares en los que se asienta su apuesta, junto con el impulso a las carteras gestionadas y a la asignación de activos, los productos alternativos ilíquidos y los cada más vez más conocidos fondos temáticos o megatendencias.

«El interés por los productos sostenibles es imparable», asegura Vadillo, subrayando que para BBVA «no es una estrategia nueva», pues fue la primera gestora que firmó los principios de inversión responsable de Naciones Unidas, «allá por el 2008». Buscan ser la firma de referencia en inversión sostenible en los mercados en los que operan.

Alberto Gómez-Reino, al frente de Inversión Socialmente Responsable de BBVA AM, abunda en ello, recordando que aunque actualmente confluyan múltiples acciones y normativas que apuestan por la sostenibilidad, en el futuro aún irá a más, el cliente también lo demandará así y la gestora irá ampliando y completando su actual gama de productos (en torno a 2.000 millones gestionados en cuatro fondos).

Ambos subrayan que, lejos de detraer valor, la inversión socialmente responsable lo aporta y aumenta, como prueba la evolución de los dos últimos años en favor de las carteras de inversión que incorporan criterios sostenibles. «Para nosotros no ser sostenibles no es una opción y por eso es un criterio que aplicamos de forma general a todas nuestras carteras», dice Vadillo, enfatizando que ser socialmente responsable «tiene sentido para las empresas no solo porque aporte rentabilidad, sino porque les permite financiarse mejor, ser más innovadoras o tener mejor imagen de marca».

Interés creciente en Galicia

En Galicia es «creciente» el interés por la inversión sostenible -especialmente en la provincia de A Coruña-, donde los diferentes fondos de BBVA Asset Management cuentan con casi 2.000 partícipes, con una media de 25.000 euros. Entre los fondos ESG, Vadillo destaca especialmente el BBVA Futuro Sostenible, un fondo multiactivo «que, además, es solidario, ya que distribuye parte de las comisiones (un millón de euros) entre oenegés de todo el país». En el 2019 fue uno de los fondos de inversión socialmente responsables con mayores entradas, pues se situó en el número 13 del ránking europeo de mayores suscripciones netas.

¿Y el perfil de riesgo del cliente? ¿Cómo pesa a la hora de escoger dónde invertir? «Es lo que más marca al elegir un fondo. El inversor español es muy conservador, a diferencia del anglosajón, que tiene una cultura de ahorro financiero a largo plazo -la renta variable es la que reporta mayores beneficios-», explica Gómez-Reino.

Gestión alternativa

Junto con la sostenibilidad, el impulso a las carteras gestionadas es otro de lo pilares de la estrategia de BBVA Asset Management, ya que, como sostiene su director de negocio, «va a ser una de las principales palancas de crecimiento de la industria». Así lo demuestra que más de la mitad del dinero que se gestiona (según datos de Inverco) está en este tipo de fórmula, en la que el cliente elige el perfil de riesgo pero luego delega su inversión en la entidad.

El tercer eje es la gestión alternativa a la renta fija y variable tradicionales. Se focaliza en empresas que no cotizan y que, por tanto, son ilíquidas. «Tienen un perfil de riesgo diferente y dan rentabilidades esperadas más altas», apunta Vadillo, recordando que fueron de las primeras gestoras en trabajar esta gestión alternativa, con fondos de capital privado, «un nicho de mercado muy interesante».

La inversión temática, también conocida como «megatendencia» es la última línea estratégica que los expertos de BBVA potenciarán y a la que auguran un amplio recorrido.

Tecnología, ciencia, investigación en salud o demografía -por las oportunidades vinculadas a la longevidad- son las claves de sus fórmulas de inversión.