Los contribuyentes gallegos contarán con atención virtual y más formas de pago

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

Marcos Míguez

El Plan de Control Tributario para este año intensifica el control de las herencias rechazadas y de la deslocalización fiscal

20 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Para facilitar el siempre poco apetecible trámite de pagar impuestos, la Axencia Tributaria de Galicia (Atriga) ha incluido en el Plan de Control Tributario para este ejercicio -publicado este lunes en el Diario Oficial de Galicia- una serie de iniciativas con las que simplificar el proceso. Así, siguiendo los pasos de la Agencia Tributaria (AEAT) estatal, iniciará los trámites para contar con un centro de atención virtual, aprovechando el rediseño de su página web.

Dicho centro virtual prestará exclusivamente asistencia a la ciudadanía por medios electrónicos o telefónicos. Se sumará a la atención presencial en las oficinas, que a su vez ampliará la cita previa para mejorar el servicio y reducir las esperas.

Potenciar la atención «online»

Según explicó la Consellería de Facenda, se trata de reforzar los canales de información y asistencia, «potenciando a administración electrónica». En este punto se incluye el referido rediseño de la web de la Atriga «para simplificar o seu uso e operatividade, outorgando un maior protagonismo aos servizos dos contribuíntes e á realización de trámites por vía electrónica».

El citado plan de control está compuesto por las directrices generales de actuación y por los planes de gestión tributaria, inspección y recaudación, en los que en la veintena de páginas que publica el DOG se detallan los ejes y objetivos principales a alcanzar en el ejercicio.

Así, en el eje relativo al control, el plan del 2021 también incluye entre las novedades en el ámbito de la información y la asistencia al contribuyente la mejora de las formas de pago a su disposición, universalizando el pago online con tarjeta (TPV virtual), y avanzando en los abonos mediante domiciliación bancaria.

La consellería recuerda que ya se universalizó el año pasado la posibilidad de que cualquier ciudadano pudiese pagar online, a través de la oficina virtual tributaria (OVT) y con una tarjeta de crédito o débito, cualquier ingreso gestionado por la Atriga, sin necesidad de desplazarse a una oficina bancaria. Ahora el sistema también se implantará de forma presencial en las cinco delegaciones territoriales de la Atriga.

Igualmente se extenderá la posibilidad de realizar el pago mediante cargo en cuenta y domiciliación bancaria en las presentaciones telemáticas de tasas y precios. «Trátase de facilitar aos contribuíntes o cumprimento das súas obrigas e evitar os desprazamentos ás entidades bancarias co conseguinte aforro de tempo e diñeiro», dice Facenda.

La hoja de ruta del ente tributario también subraya, con el objetivo de «potenciar o cumprimento voluntario das obrigas tributarias», que avanzará en el intercambio de información con otras administraciones tributarias y colectivos profesionales.

Coto a la deslocalización fiscal

Con la competencia fiscal entre autonomías sobre la mesa, y en pleno debate sobre la armonización tributaria para impedirlo, el plan de la Atriga incluye entre sus líneas de trabajo la comprobación de los domicilios declarados y de sus modificaciones «para corrixir deslocalizacións por simulacións de cambios de residencia, en colaboración e coordinación coas restantes comunidades e a AEAT, co único fin de lograr de forma indebida unha menor contribución fiscal».

Control de las herencias

Si en el plan del ejercicio pasado se puso el foco en el control de la tributación de las donaciones con causa onerosa, ejemplos de las cuales son los contratos vitalicios -figura recogida en el derecho civil gallego que consiste en la entrega de un bien a cambio de recibir cuidados, alojamiento y manutención en contraprestación-, en esta ocasión, dentro de las actuaciones de control, se recogen las comprobaciones de las renuncias a herencias, para asegurarse de que se ajustan al ordenamiento jurídico.

Igualmente, pero ya en lo relativo a la fase recaudatoria, el fisco controlará dichas renuncias a herencias «por se puideren prexudicar os intereses de cobramento desta e co fin de iniciar, neste caso, as actuacións procesuais necesarias na vía civil ou penal».

Cabe recordar que las renuncias son un fenómeno que no ha dejado de crecer -tanto en Galicia como en el resto del país- desde la pasada crisis y que batieron su récord en el 2019, cuando en la comunidad se rechazaron 3.134 legados. Fuentes de la consellería aseguran que este control no es una novedad ni está vinculado con el incremento de las renuncias. «Trátase simplemente de comprobar se, cando alguén renuncia a unha herdanza, a persoa que non era herdeira e pasa a selo, presenta a herdanza; ou se como consecuencia da renuncia, non hai herdeiros e eses bens pasan á Xunta», explican.