El banco ya ha reciclado 90.000 unidades, cuyos componentes se utilizarán para nuevos productos
25 mar 2021 . Actualizado a las 16:25 h.Las tarjetas de crédito y débito dañadas o caducadas tendrán nueva vida. El BBVA ha puesto en marcha un sistema de recogida de estas tarjetas de plástico para su reciclaje, darles otra vida y devolverlas al mercado con una forma nueva. Se trata de una iniciativa con la que se persigue fomentar la economía circular y contribuir con la conservación del medioambiente, según la información difundida por BBVA.
La propuesta comenzó el pasado mes de diciembre y desde entonces, el banco ha reciclado ya cerca de 90.000 tarjetas en toda España en apenas tres meses lo que supone una reutilización del 90 % de las materias primas que las componen para producir nuevos productos. De media, BBVA emite aproximadamente un total de 950.000 tarjetas al trimestre -3,8 millones al año-, ya sea por caducidad, robo, pérdida o nueva emisión. En esta primera recogida, se ha reciclado alrededor del 10% de la media total trimestral.
Este proceso de transformación se acomete en colaboración con las fundaciones medioambientales Ecoasimelec y Ecopilas, del grupo Recyclia, la mayor entidad administradora de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, pilas y luminarias de España. El reciclaje de las tarjetas de BBVA y la recuperación de los elementos que las componen ha permitido reutilizar casi de manera íntegra las tarjetas recogidas, dando una segunda vida a sus materias primas para crear otros materiales o incluso para la creación de energía a través de la quema del 3,8% del material usando maquinaria controlada para la emisión de gases nocivos. Además, la recogida selectiva de estas tarjetas facilita la gestión de los residuos en las plantas de reciclaje.
BBVA tiene experiencia en este tipo de conversiones. Fue la primera entidad bancaria de Europa en lanzar una tarjeta de plástico reciclado en PVC (policloruro de vinilo) que procede de desechos de otros materiales plásticos como el embalaje o la automoción.
La reutilización no solo se reducirá a las tarjetas de crédito y débito, sino que los clientes de la entidad que usen los dispositivos de telepeaje, conocidas como VIA T en sus oficinas una vez que hayan caducado también se analizarán por si pudieran ser reutilizados. En el caso de que no fuera factible, se envían a la planta de reciclaje cumpliendo así con la normativa a través de los Sistemas de Responsabilidad Ampliada del Productor. Solamente la próxima semana se reciclarán 76.270 unidades de VIA T, con un peso total aproximado de 1.500 kilogramos.