El operador del mercado de electricidad propone romper la barrera e ir a precios negativos

F. F. LA VOZ

ECONOMÍA

Carmen Becerril, presidenta del operador del mercado eléctrico
Carmen Becerril, presidenta del operador del mercado eléctrico ANGEL MANSO

Ahora no puede costar menos de cero euros, pero OMIE plantea que se pueda negociar entre -500 y 3.000 euros

05 feb 2021 . Actualizado a las 08:49 h.

El operador del mercado de electricidad, OMIE, ha propuesto romper los límites que ahora contienen las subidas y bajadas de precio del megavatio hora negociado cada día. En la actualidad, no pueden bajar de cero euros ni superar los 180.

Yolanda Cuéllar, directora de Operación de Mercado de OMIE, explicó durante una jornada organizada por la Asociación Empresarial Eólica que las nuevas barreras permitirán cifras negativas de hasta -500 euros y de 3.000 euros hacia arriba. Esto en el mercado diario, en el que se negocia con un día de antelación. En el intradiario (que ajusta casi en tiempo real los resultados del anterior si las necesidades del sistema varían), los nuevos límites propuestos serán de 9.999 euros el megavatio hora, tanto en negativo como en positivo.

Cuéllar aclaró que el mercado diario en España está acoplado al resto de Europa, lo que quiere decir que las negociaciones diarias sobre la energía necesaria se realizan en un mismo acto y con el mismo algoritmo (euphemia) que casa los precios finales. O sea, la electricidad debería costar lo mismo en todos los países, si las interconexiones en ellos fueses ilimitadas. No lo son y la que une España con Francia es un «cuello de botella» que deja circular una cantidad mínima de energía.

Esa interconexión quedó parcialmente bloqueada el 8 de enero, cuando un fuerte desajuste en la tensión —originada en Croacia— a punto estuvo de provocar un gran apagón en toda Europa. No fue así gracias a la rápida reacción de los operadores de redes nacionales —en España, Red Eléctrica— y al servicio de interrumpibilidad de Francia e Italia. Varias compañías de esos países se desconectaron para equilibrar el sistema.

En esa misma jornada, Juan Temboury, director general de Fortia, comercializadora de electricidad de los grandes consumidores, reivindicó el servicio de interrumpibilidad como garante de la seguridad de suministro, como se demostró en ese episodio europeo.

En España, ese mecanismo desapareció el verano pasado.Será sustituido por otra herramienta de gestión de la demanda que se abrirá tanto a consumidores como a productores de electricidad, dispuestos tanto a reducir consumo como a aumentar generación para equilibrar la balanza.