El ministro de Seguridad Social zanjó los rumores que han circulado en los últimos días sobre su posible salida del Gobierno
26 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.José Luis Escrivá no se plantea dimitir. El ministro de Seguridad Social zanjó ayer los rumores que han circulado en los últimos días sobre su posible salida del Gobierno y rechazó totalmente que vaya a presentar su dimisión tras la polémica generada en torno a si propuso ampliar el período de cálculo de las prestaciones de 25 a 35 años.
Es más, en una entrevista en televisión aseguró que se siente «extraordinariamente cómodo» dentro de este Ejecutivo de coalición, y destacó el alcance de medidas como los ERTE y las prestaciones a autónomos que este martes se prorrogarán en el Consejo de Ministros.
No renuncia tampoco a avanzar en la reforma de las pensiones, que prevé llevar al Congreso en distintas fases a lo largo de este 2021. Esto significa que, al contrario de lo que se ha hecho las dos últimas veces (en el 2011 y el 2013), tramitará por separado las diferentes modificaciones, que se irán aprobando a medida que las vayan trabajando y consensuando con los agentes sociales.
Medidas que, defendió, están alineadas con las recomendaciones del Pacto de Toledo, rechazando la acusación vertida por el secretario de Estado de Derechos Sociales y responsable de Economía de Podemos, Nacho Álvarez, de que pretende llevar a cabo una reforma de las pensiones que no cumple con el acuerdo de Gobierno. «Conozco perfectamente los acuerdos del pacto de coalición y estamos cumpliendo todo lo que dice allí», afirmó. A su juicio, «se ha construido un relato en las últimas semanas que no tiene ningún recorrido», en referencia a la polémica sobre la ampliación de 25 a 35 años del período de cálculo.
De hecho, el ministro pidió a sus compañeros del banco azul que dejen las pensiones fuera del debate político: «El apropiarse de parte de este relato no es correcto y no va a tener recorrido porque se verá que no va a haber recortes y que esto va a ser negociado», prometió.
Sin embargo, no descartó ampliar los años empleados para el cálculo de las pensiones -así consta en el documento enviado a Bruselas- y reconoció que habrá que «contemplar períodos relativamente largos» y realizar «cálculos precisos con distintos tipos de carreras profesionales de trabajadores», algo que, aseguró, «aún no hemos hecho», por lo que evitó poner cifras al tijeretazo que supondría. Cabe recordar que en los documentos filtrados se estimaba que la ampliación de 25 a 35 años supondría una rebaja media superior al 6 %.
El complemento para madres
Lo que sí tiene más claro el ministro es el calendario de la reforma de las pensiones. «Nuestro objetivo es que al Congreso vamos a empezar a llevar cosas en 15 días», anunció. La primera medida que verá la luz es el nuevo complemento para la pensión de madres trabajadoras, que el Gobierno se ha visto obligado a modificar tras la sentencia del Tribunal de Justicia Europeo que lo tacha de «discriminatorio», por lo que esta vez incluirá también a los hombres. El nuevo diseño, que ya está «prácticamente cerrado», consiste en una pensión complementaria asociada a los vacíos de cotización o la caída de las bases posteriores al nacimiento de los hijos y solo lo podrá cobrar el progenitor que más afectado se hubiese visto.