«Buenas tardes, le llamo para ofrecerle un descuento en la factura de la luz»

F. F. LA VOZ

ECONOMÍA

patricia baelo

Las compañías aceleran sus campañas de captación de clientes aprovechando el alza de los precios

22 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El revuelo provocado por el incremento de los precios de la electricidad durante varios días de este mes parece haber animado a las compañías a intensificar las campañas de captación de clientes hacia tarifas a precio fijo en el mercado libre, una opción considerada más cara por todos los expertos.

«Buenas tardes, le llamo para ofrecerle un descuento en la factura de la luz, esta llamada está siendo grabada». Es el mensaje que se repite estos días en los hogares cuando se descuelga el teléfono. Y es un mensaje que cala en muchos consumidores. De hecho, la mayoría (16 millones) están en el mercado libre y casi todos con precio fijo. Frente a ellos, casi once millones de famlias se mantienen en el regulado, aquel cuya tarifa está directamente vinculada al mercado diario de electricidad. Por tanto, salen ganando cuando este se abarata -en el 2020 registró el precio más bajo desde el 2004-, y salen perdiendo cuando se encarece, como ocurrió en las últimas semanas.

Pese a esa volatilidad, todos los expertos defienden con uñas y dientes el mercado regulado frente al libre. También porque, en el primero, las compañías tienen las manos atadas para fijar sus precios, añadir servicios adicionales que lo que hacen es encarecer la factura y ofrecer descuentos que en realidad no lo son.

Desde el Ministerio para la Transición Ecológica van a imprimir un nuevo impulso a la tarifa regulada implantando una nueva estructura de costes que premiará el consumo eficiente y en horas más baratas y que establecerá la discriminación horaria obligatoria para todos los consumidores.

Precios a futuro

La ministra para la Transición Energética, Teresa Ribera, avanzó hace unos días que el precio de la electricidad bajará tanto en febrero, un 37 %, como en el segundo trimestre, un 45 %. También explicó que para los años 2022 y 2023, debido a la entrada masiva de renovables al sistema, los precios en España estarán por debajo de otros tradicionalmente más baratos, como el alemán o el francés.