Los gallegos que abren un negocio siguen apostando por la hostelería y el comercio

Entre abril y diciembre, en plena pandemia, con los aeropuertos casi desiertos y las vacaciones reducidas a escapadas nacionales, en Galicia abrieron seis empresas dedicadas a las reservas turísticas, entre agencias de viajes y otros operadores dedicados a reservas en un sector que, a día de hoy, mantiene aún a 25.000 trabajadores en ERTE. Y es que, pese al impacto del virus, en el 2020 se constituyeron en la comunidad casi 3.200 nuevas empresas, una cifra que supone un descenso del 15,8 % respecto al año anterior, pero nada desdeñable en un contexto económico y sanitario que no invita precisamente a emprender.

De los datos del Registro Mercantil recopilados y publicados ayer por el Instituto Galego de Estatística (IGE) se desprende que el comercio y la hostelería siguieron siendo los sectores preferidos de los gallegos a la hora de montar un negocio. Pese a las severas restricciones de aforos y horarios y a los gastos adicionales por las nuevas medidas de prevención, abrieron en la comunidad 402 nuevas tiendas minoristas, apenas 35 menos que en los doce meses anteriores, y más de 300 bares y restaurantes, un sector que se mantuvo a flote en parte gracias a la diversificación hacia servicios de reparto a domicilio o la entrega de productos para consumir fuera de los locales.

De hecho, ese vuelco hacia el consumo en el hogar se tradujo en un acelerón de un sector ya de por sí pujante, como el del transporte terrestre y la logística, en el que se constituyeron 86 nuevas empresas, nueve más que un año antes. No fue el único que creció. Lo hizo también el financiero -con 52 nuevas sociedades en un contexto de fuerte repunte del ahorro y oportunidades de inversión para quien tenía la liquidez suficiente para arriesgar en época de crisis- o el inmobiliario, con 222 empresas creadas en un año en el que el confinamiento provocó numerosas mudanzas y reformas.

Nada que ver con lo que ocurre con las actividades deportivas, recreativas o de ocio, que suman apenas 43 nuevos negocios en toda la comunidad, un desplome del 40 % respecto a los doce meses anteriores. Y, aunque puede resultar paradójico en plena pandemia, también se frena la apertura de nuevos establecimientos sanitarios: 45 frente a los 75 del ejercicio previo.

Más cierres a final de año

Si abrieron menos empresas, también es cierto que cerraron menos. En concreto, el Registro Mercantil certificó la disolución de 1.233 sociedades en Galicia, casi un 18 % menos que en el 2019, en parte por la imposibilidad de realizar trámites durante los meses del confinamiento, aunque el balón de oxígeno lanzado desde las Administraciones en forma de ERTE, prestaciones de autónomos y otras subvenciones ayudó a contener la hemorragia en un primer momento.

Sin embargo, los datos de fin de año certifican un empeoramiento de la tendencia, ya que en diciembre se disolvieron 204 sociedades mercantiles, frente a las 127 de noviembre y las 183 del mismo mes del año anterior, lo que supone un alza interanual del 11,5 %. Cifra que se suma a la caída del 4 % en la apertura de nuevas empresas en plenas Navidades y que apunta a un inicio del año complicado hasta que la mejoría de la situación sanitaria reactive definitivamente el consumo.

---

---

---