El Banco Mundial alerta de que el retraso en la vacunación lastrará la recuperación económica

Edurne Martínez MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

El organismo vaticina una expansión del 4 % para el 2021, pero podría reducirse al 1, 6 %

05 ene 2021 . Actualizado a las 17:54 h.

La prioridad política a corto plazo es el control de la propagación de covid y la garantía de una distribución «rápida y amplia» de las vacunas. Así lo indica el Banco Mundial en un informe sobre las perspectivas económicas para el 2021 publicado este martes, en el que calcula que la economía mundial se expanda un 4 % este año -desde el 4,2 % previsto anteriormente- siempre que la distribución de las vacunas sea efectiva. En caso de que este proceso se ralentice y los contagios sigan aumentando, el organismo advierte que la expansión mundial podría limitarse al 1,6 %.

Y es que las perspectivas a corto plazo siguen siendo «muy inciertas», por lo que el Banco Mundial reconoce que los resultados de crecimiento del PIB pueden ser diferentes a lo esperado actualmente. Incluso en un escenario más optimista, con un control exitoso de la pandemia y un proceso de vacunación más rápido del previsto, el crecimiento podría acelerarse hasta casi el 5 % en este año que acaba de comenzar.

El organismo explica que en las economías avanzadas, la incipiente recuperación del verano se estancó en el tercer trimestre por la incidencia de la segunda ola del virus, lo que sugiere una recuperación «lenta y difícil». Así, prevé que el PIB de Estados Unidos se expanda un 3,5 % este año después de una contracción estimada del 3,6 % en el  2020. En la eurozona, se prevé que el PIB crezca este año un 3,6 % después del desplome del 7,4 % en el 2020.

En los mercados emergentes y economías en desarrollo, donde incluyen a China, el organismo calcula que se crezca un 5 % este año, tras una contracción del 2,6 % en el 2020. El gigante asiático se expandirá un 7,9 % en el 2021, tras haber conseguido cerrar el 2020 con un crecimiento del 2 %.

Eso sí, el Banco Mundial reconoce que el «colapso» de la actividad económica el año que acaba de terminar ha sido «ligeramente menos grave» que lo que en un principio se había proyectado debido a que la contracción de las economías avanzadas ha sido menos pronunciado de lo previsto y a que la recuperación de China ha sido más sólida de lo anticipado. «Será necesario abordar las fragilidades financieras de muchos países, ya que la crisis del crecimiento afecta a los presupuestos de los hogares y los balances de las empresas más vulnerables», señala Carmen Reinhart, vicepresidenta y primera economista del Grupo Banco Mundial.

Además, el informe destaca que la pandemia ha amplificado los riesgos en torno a la acumulación de deuda en ciertos países, lo que podría frenar el crecimiento a largo plazo si no se toman medidas. «La covid ha exacerbado los riesgos de la deuda y es probable que las débiles perspectivas de crecimiento aumenten aún más la carga de la deuda y erosionen la capacidad de servicio de los prestatarios», asegura Ayhan Kose, vicepresidente de Crecimiento Equitativo del Banco Mundial, que alerta de que los países en desarrollo no pueden permitirse «otra década perdida».

En este sentido, se espera que la pandemia arrastre «efectos adversos» de larga duración en la economía mundial. La desaceleración prevista para los próximos diez años puede empeorar por falta de inversiones, empleos precarios y alto nivel de paro. «La economía mundial se encamina hacia un decenio desalentador en términos de crecimiento salvo que los gobiernos pongan en marcha amplias reformas que mejoren los elementos de impulso de un crecimiento económico equitativo y sostenible», señala el informe.