Díaz Barreiros descarta presentarse a las nuevas elecciones a la patronal, que serán el 15 de enero

Mario Beramendi Álvarez
MARIO BERAMENDI SANTIAGO DE COMPOSTELA

ECONOMÍA

CEG

Las confederaciones de A Coruña y Lugo retiran su confianza al último presidente de la CEG

01 dic 2020 . Actualizado a las 20:54 h.

La patronal gallega celebrará nuevas elecciones el próximo viernes de 15 de enero para elegir presidente, después de la vacante dejada en el cargo por José Manuel Díaz Barreiros, nombrado por aclamación el pasado 24 de diciembre, y que decidió dimitir a las 48 horas al ponerse en duda el proceso por una parte de las sectoriales y de la confederación pontevedresa, que exigieron información porque su nombramiento se había producido una vez iniciado el voto telemático. La nueva fecha para los comicios de la Confederación de Empresarios de Galicia (CEG) ha sido planteada esta misma tarde en la junta de vicepresidentes. La cita electoral tendrá que ser refrendada ahora formalmente por el comité ejecutivo, que es el órgano competente para adoptar esa decisión. 

En el horizonte que se abre ahora hay algo que sí parece claro. En el horizonte que se abre ahora hay algo que sí parece claro. El ourensano Díaz Barreiros no repetirá como candidato. Después de que Antonio Fontenla y Jaime López, responsables de las confederaciones de A Coruña y Lugo, respectivamente, y sus otrora grandes valedores, le retirasen su apoyo, el último presidente de la CEG explicó que nunca valoró volver a presentarse. Confirmó que continuará como vocal y que se pone a disposición de su sucesor.

La dimisión de Barreiros dejó a los pies de los caballos a Fontenla y López y dio argumentos a quienes siempre defendieron que no era un perfil de consenso y que se hacía necesario renovar la CEG. El cisma de la patronal coincide en un mal momento, justo cuando se tienen que debatir en las mesas de diálogo social los proyectos que optan a los fondos europeos de reconstrucción económica. Una situación que ha generado un profundo malestar en el Ejecutivo gallego.

El nuevo escenario que se abre supone también una oportunidad para alcanzar un consenso mayor, emprender una profunda renovación y cohesionar la patronal, porque Díaz Barreiros no contaba con el apoyo de una parte de las sectoriales (las organizaciones que representan las ramas de actividad) ni de la confederación pontevedresa, a pesar de tener un respaldo más que suficiente y de que ofreció a su rival, Pedro Rey, integrarse en su equipo en aras de la unidad empresarial, una oferta que rechazó pese a prometer lealtad. Precisamente, esta organización provincial se ha mostrado muy crítica con lo sucedido, y su presidente, Jorge Cebreiros, ha llegado incluso a anunciar que someterá a consulta a sus bases si conviene o no seguir en la CEG al poner que esté ahora mismo cumpliendo su función.

La patronal gallega cumplirá el próximo mes de enero tres años sin presidente, un período en el que ha estado provisionalmente dirigida por la junta de vicepresidentes, con Antonio Fontenla a los mandos. Desde que ganase Fernández Alvariño en el verano del 2013, por la CEG han pasado ya cuatro presidentes. Y el más fugaz de todos ha sido Díaz Barreiros: apenas dos días en el cargo.

Las organizaciones sectoriales, que agrupan a las ramas de actividad, tienen previsto celebrar una reunión este miércoles para analizar la nueva situación abierta en la patronal. Defienden que se convoque a los órganos de gobierno (junta directiva y comité) para tener voz en la toma de decisiones, y que no dirija el proceso la junta de vicepresidentes, en la que suelen coincidir las confederaciones de A Coruña, Lugo y Ourense y en la que Pontevedra suele estar en minoría.