Iberdrola y Greenalia estudian la costa gallega para futuros parques marinos

Beatriz García Couce
beatriz couce FERROL / LA VOZ

ECONOMÍA

JOSE PARDO

La comunidad es una de las áreas estratégicas para el sector por su viento

06 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Promotores, reguladores y asociaciones sectoriales prevén que dentro de diez años se generen en las costas españolas a través de parques marinos entre 2.000 y 3.000 megavatios eólicos. Cumplir esos objetivos requiere de unos trámites regulatorios que el Gobierno ya ha puesto en marcha, la realización de las primeras subastas de energía (que se prevén para el próximo año) y empresas dispuestas a invertir en estos recintos. La eléctrica de origen vasco Iberdrola y la energética gallega Greenalia -que ya cuenta con proyectos del sector en Canarias- son dos de las compañías que han pasado a la acción en las costas gallegas.

En ambos casos, por el momento, en el ámbito de los estudios, esenciales en las primeras fases de desarrollo de este tipo de instalaciones marinas. Así quedó ayer de manifiesto en una mesa redonda sobre el despegue de las energías marinas en España, organizada por Enermar. Ignacio Pantojo, responsable de la división de eólica flotante de Iberdrola, admitió que, aunque la empresa prefiere apelar a la prudencia en esta fase de los procesos, admitió que «en Galicia hay varias zonas interesantes desde el punto de vista del recurso».

Un recurso, el viento, que sopla tanto en tierra como mar adentro con una calidad que hace de Galicia una de las zonas prioritarias para el desarrollo del sector. «Claro que Galicia es una de las zonas en las que tenemos interés, porque entendemos que el recurso que tiene puede ser rentable», añadió, aunque matizó que Iberdrola se encuentra en estos momentos analizando también otras áreas.

Greenalia, que tiene un parque ya autorizado en Gran Canaria, pero ha lanzado otros cuatro proyectos más en el archipiélago, tampoco oculta su interés por desarrollar este negocio en aguas gallegas. Manuel García, consejero delegado de la compañía, aseguró que tiene «perfectamente estudiada toda la zona de Galicia y del noroeste en donde puede haber potencial para la eólica marina». Avanzó que, «si vemos que el impacto puede ser positivo», dará un paso adelante con el lanzamiento de parques. No obstante, por el momento, el principal escollo con el que se encuentra el sector es el del desarrollo de la regulación específica para los recintos.

Víctor Marcos, director de Renovables del IDAE, afirmó que el trabajo que se está acometiendo actualmente tiende a conjugar tres líneas de actuación: cómo se llevará a cabo el acceso a la red, los espacios que pueden acoger los parques y la retribución.

En España, debido a sus condiciones geográficas, los parques tienen que ser flotantes, ya que la profundidad de las aguas hace inviable la eólica marina fija. Esta ha logrado situar el coste de generación en unos 44 euros por megavatio hora, mientras que la flotante precisa de casi el doble. Seguir recortando esas tarifas es uno de los retos para el sector, en el que tienen que implicarse toda la cadena de suministro.

Navantia, solo fabricante

Navantia, y en concreto el astillero de Fene, en alianza con Windar, ha fabricado 11 de las 13 cimentaciones para los parques flotantes que han comenzado a instalarse en distintos países europeos. El director comercial de Renovables de Navantia, José Luis Viguera, afirmó que, aunque se lo plantearon, la empresa desecha desarrollar un prototipo propio. También descartó la opción de que Turbinas fabrique aerogeneradores marinos.

Sánchez Galán desafía a la crisis lanzando un ambicioso plan de inversiones de 75.000 millones hasta el 2025

Receta de Ignacio Sánchez Galán para afrontar la crisis: «Invertir más», crear empleo y apostar por la I+D+i. Así lo aseguró ayer el presidente de Iberdrola durante una conferencia con analistas para presentarles el nuevo plan estratégico de la compañía, que se sostiene sobre unas inversiones históricas de 75.000 millones a lo largo de seis años, entre este 2020 y el 2025.

«De las crisis se sale invirtiendo más, creando más puestos de trabajo y siendo más eficientes», señaló el directivo, quien destacó que el plan lanzado por la energética es «el mayor presentado por una empresa española en un período tan corto de tiempo». Avanzó que no se basa en «fantasías o sueños», sino que parte de perspectivas «ambiciosas, pero realistas para los próximos años».

Impulso renovable

El plan, dotado con 75.000 millones, dedicará el 21 % de los fondos a reforzar el negocio en España. Es decir, 14.300 millones, que representan un incremento del 60 % frente al plan anterior. De esa cifra, casi la mitad, unos 7.000 millones, se dirigirán a renovables y otros 4.500 millones, a redes.

La compañía no detalló la inversión por comunidades autonómicas. En los últimos meses ha reactivado la construcción de parques eólicos en España, aunque de momento no ha confirmado ninguno nuevopara Galicia. Sánchez Galán avanzó hace unos meses que tenían previsto ampliar la hidráulica gallega de Soutelo, en el río Sil, para hacerla reversible. El presidente de Iberdrola apostó ayer por las centrales de bombeo para almacenar electricidad como un componente crucial de respaldo para las renovables. «Creemos en el almacenamiento, cuanta más renovable se incorpore, más almacenamiento será necesario», añadió.

El foco, en EE.UU. y el Reino Unido

El esfuerzo inversor de la compañía se concentrará en Estados Unidos y el Reino Unido, con 34.000 millones, el 50 % del total.

De los 75.000 millones con los que está dotado el plan, el 90 % se dedicará a consolidar su modelo de negocio, basado en más energías renovables, más redes, más almacenamiento y más soluciones inteligentes para sus clientes. Los 7.000 millones de euros restantes corresponden a la adquisición recientemente anunciada de la compañía americana PNM Resources.

Iberdrola prevé efectuar cerca de 20.000 nuevas contrataciones e impulsar hasta 30.000 puestos.

El beneficio neto se elevaría a 5.000 millones, tras crecer anualmente entre un 6 % y un 7 %. El año pasado, la corporación ganó 3.406 millones; y hasta septiembre cosechó un resultado neto de 2.681 millones a pesar del contexto actual.