Hacienda acotará la subida del IRPF a quienes ganen más de 300.000 euros

j. m. camarero MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Mariscal | efe

La medida afectará a menos de 4.000 contribuyentes en Galicia

21 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los Presupuestos Generales del Estado incluirán, finalmente, un incremento del IRPF para las rentas altas, tal y como el Gobierno ha venido anunciando desde que echó a andar la legislatura en enero. Pero no será tan ambiciosa como a algunos les hubiese gustado. Y es que, a medida que avanzan las negociaciones para sacar adelante las nuevas cuentas públicas, se reduce el colectivo de ciudadanos que podrían verse afectados por esta vuelta de tuerca fiscal. Tanto es así que serán menos de 100.000 los contribuyentes que pagarán más dinero por este tributo a partir del próximo año, apenas un 0,5 % del total.

El acuerdo de Gobierno entre PSOE y Unidas Podemos fijaba en 130.000 euros la cantidad anual a partir de la cual el IRPF se incrementaría en dos puntos porcentuales, y cuatro para la parte que excediera de 300.000 euros. Sin embargo, Hacienda prevé elevar esas cuantías ante la situación por la que atraviesa la economía, golpeada por el coronavirus y la parálisis de actividad.

Fuentes de la negociación apuntan que el alza de impuestos podría afectar a quienes ingresen más de 300.000 euros. Es el cálculo en el que se habría basado Hacienda para elaborar el plan presupuestario remitido a la Comisión Europea la semana pasada. En ese documento, el Ejecutivo anunciaba un ingreso adicional de 550 millones en «impuestos directos» sin especificar cuáles. Para llegar a esa cifra de recaudación, el departamento dirigido por María Jesús Montero ha trabajado en una subida del IRPF a partir de los 300.000 euros que ahora ha puesto encima de la mesa de la negociación de las cuentas.

Aunque no será hasta el último momento cuando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el vicepresidente, Pablo Iglesias, definan esas horquillas, en el partido morado apuntan el objetivo de que sean los sueldos superiores a los 200.000 euros los que asuman un alza del IRPF a partir del 2021.

En cualquier caso, el número de contribuyentes afectados será menor a los 94.500 que declaran rentas por encima de los 150.000 euros anuales (apenas 3.900 en Galicia), que es el único dato desagregado que ofrece la Agencia Tributaria por nivel de rentas. La parte del león de la recaudación, sin embargo, proviene de aquellos contribuyentes que declaran entre 21.000 y 60.000 euros al año (un tercio de todos los declarantes, responsables del 56 % de los ingresos en concepto del IRPF). Frente a ellos, aquellos que ganan más 60.000 euros son apenas el 4 % de los contribuyentes, aunque aportan un 30 % de la recaudación.

La otra figura sobre la que se quiere actuar es el impuesto de patrimonio, aunque en el Gobierno son conscientes de la dificultad normativa que ello implicaría. Se trata de un tributo cedido a las comunidades autónomas, que pueden bonificarlo casi en su totalidad, como ocurre en Madrid.

En realidad, el incremento de la recaudación prevista por el Gobierno en las nuevas cuentas públicas -casi 7.000 millones, según el documento remitido a la UE- llegará más por la vía de nuevos impuestos, como las tasas Google y Tobin, el gravamen al diésel y otras medidas fiscales.

María Jesús Montero aclaró ayer que no hay «escollos» en la negociación de los Presupuestos y adelantó que las cuentas incluirán dotación para la futura ley de vivienda y una subida del IPREM (índice público de rentas de efectos múltiples), que sirve como referencia en numerosos trámites como la concesión de ayudas. La intención del Gobierno es aprobar el proyecto, que está «prácticamente ultimado», el martes que viene. Esto implica que aún hay unos «días» para resolver «algún fleco pendiente».

Respecto a la regulación del alquiler, otra de esas divergencias a superar, Montero señaló que el Ministerio de Agenda Urbana está trabajando en el proyecto de ley de vivienda que abordará esta materia y que será esta normativa la que plasme las medidas, aunque las cuentas incluirán las partidas necesarias para sufragar «las primeras acciones». En cualquier caso, la ministra celebró el «altísimo grado de consenso» con Unidas Podemos respecto a las medidas incluidas en las cuentas y se mostró convencida de que se van a saldar con «un acuerdo muy importante».