Alberto Cáceres Tejedor: «Estoy seguro que el 2021 será mejor que el 2020, con vacuna o sin ella»

Sofía Vázquez
Sofía Vázquez REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

CESAR QUIAN

El consejero delegado de Trison llegó a la compañía hace tres años después de que Portobello adquiriese el 70 % de la firma

10 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Diez minutos de conversación son suficientes para saber que Alberto Cáceres Tejedor (Madrid, 5 de julio de 1968) es un verdadero diplomático. Ocupa el primer puesto ejecutivo de Trison, una compañía que, por segundo año consecutivo, lidera en Europa el sector de la integración audiovisual. Trison acaba de hacer las pantallas digitales de los aeropuertos de Madrid y de Barcelona, de la estación de tren de Atocha, de la torre Picasso, y también ha firmado proyectos en Nueva York, Kenia o Etiopía. Los términos ingleses están integrados en su vocabulario.

-¿Qué tal por Galicia?

-Estoy encantado de estar en Trison, empresa innovadora y líder a nivel europeo. A Coruña me encanta. Es una ciudad ideal.

-¿Ideal para vivir para siempre o por unos años?

-Para todo. Ideal para estar de vacaciones y trabajar. Tiene el tamaño justo y no le falta de nada.

-A Trison la compró en el 2016 la española Portobello. ¿Cómo está el capital?

-Portobello, la primera empresa europea en private equity, es el socio mayoritario, con un 70 % del capital. Nuestro fundador [se refiere a Trison], Carlos Saavedra, es el máximo accionista a nivel individual, con algo menos del 30 %, y está presente en el día a día. El resto de las acciones las tienen inversores internacionales.

 -Usted llegó en el 2017 y han comprado TTM Communication (hoy TTM Trison) y Beaver Group (hoy Beaver Trison).

-Hemos comprado esas dos compañías, una en Francia y otra en el Reino Unido. También hemos creado una nueva división que se llama Nexum Trison para el desarrollo de arte y arquitectura digital y contenidos, muy destinados a centros comerciales y espacios públicos. Estamos creciendo y diversificando. Tenemos presencia en 13 países a través de filiales. Somos una empresa muy global y muy internacional. El 70 % de los proyectos que ejecutamos están fuera de España. Portobello tiene un conocimiento claro de los mercados internacionales, que es nuestro target [objetivo]. La sede social está en Galicia, donde están los órganos de decisión a nivel global.

-El objetivo es...

-Crecer a doble dígito. Tanto orgánicamente como con compras. Queremos crecer a nivel internacional y diversificar (mercados y sectores). Estamos en el retail, pero nos hemos ganado una reputación en los grandes espacios de centros comerciales. Los últimos tres centros comerciales que cuentan con tecnología de Trison han recibido premios internacionales: Arenas de Barcelona, Lagoh en Sevilla y Xmadrid. También trabajamos a nivel global con grandes empresas de automoción como Porsche. Hemos hecho proyectos con Audi, Mercedes, Citroën. E Inditex, por supuesto. Estamos en fase de crecimiento y enriquecimiento del valor de la compañía. 

-Desarrollan proyectos en una media de 112 países. Comenta que en Islandia o Kenia han estado. Presentan pantallas luminosas, inteligentes, sonidos envolventes, establecimientos que se abren a los cinco sentidos... En Madrid hay esas pantallas, en Nueva York, en Madrid..., pero ¿en Kenia o Etiopía también hay dinero para estos productos?

-Nosotros trabajamos para multinacionales, y ellas acaban teniendo establecimientos en prácticamente todos los países. Quizá no actúan con la misma intensidad en Nueva York que en Nairobi, pero tienen que estar presentes y su marca se ve en ambas capitales. Nosotros acompañamos a esos grandes clientes en su desarrollo a nivel internacional. Hemos tenido proyectos en Etiopía, en toda Latinoamérica, en Asia. Las grandes marcas internacionales son globales y están presentes en todos los mercados.

-Hablan de crecimiento a doble dígito, ¿ni el covid les va a frenar?

-El covid nos ha afectado. Pero nuestras perspectivas están intactas de cara al 2021. Creo firmemente que tenemos una capacidad de crecimiento impresionante. El mercado de la digitalización de los espacios es claramente tendencia, futuro. Y nosotros estamos liderando ese futuro en Europa.

-¿Cree que en el 2021 tenemos vacuna y entonces se habrá acabado el covid?

-Lo deseo más que creerlo. Nos tendremos que adaptar. Las sociedades no paran, se transforman, con vacuna o sin ella. Estoy seguro de que el 2021 será mejor que el 2020. Y sí, espero que haya una vacuna y espero que haya una relativa normalidad, que siempre será diferente a la anterior.

-¿Cómo se notará el covid en la facturación de Trison?

-Casi todos los proyectos que se han parado en fase covid se han retomado, y con mayor ritmo. Veremos a dónde llegamos en diciembre. La mayoría de nuestros clientes concentran en el último trimestre del año la mayor parte de sus ventas. Todavía no hemos cerrado el ejercicio, pero soy razonablemente optimista. Claro que nos hubiera ido mucho mejor sin covid.

-¿Fabrican en el extranjero, y quieren acercar la producción?

-Ambas cosas. Hay productos que son prácticamente imposibles de no importar. Por ejemplo, la parte electrónica, los led, que se concentra en China. Nosotros intervenimos en la producción y tenemos nuestros propios diseños y especificaciones. Algunos elementos [audio] los fabricamos en España. Siempre estamos estudiando alternativas en Europa. El objetivo es tener el mejor producto disponible. Evidentemente el acercar la producción te ahorra unos costes logísticos de transporte. Te reducen los plazos de entrega en un mes, con lo cual esa opción es muy interesante.

-¿Se fía de China?

-Tenemos muy buenos partners en China y, sobre todo, tenemos un equipo de más de 20 personas que se ocupa de asegurar la calidad y la producción como en cualquier otro país en el que fabricamos. Tenemos un equipazo en China, en Japón, en Corea, en Taiwán. 

-Usted es políticamente muy correcto [se ríe]. ¿El covid nació en un mercado o en un laboratorio?

-Yo estoy siempre del lado de los científicos y no se ha demostrado otra cosa: fue un tema accidental en ese mercado en Wuhan. Pero casi todo mi tiempo se lo dedico a la empresa y, a veces, a la familia.

-¿A veces a la familia...?

-Este año ha estado desequilibrado, aunque la intensidad fue muy grande para mantener sana la empresa en fase covid. Viajo muchísimo y cuesta conciliar. En el período precovid hacía 200 vuelos al año. [Y le dio tiempo a estudia un curso de ingeniería de Formula 1. Las horas dan para mucho].

Cuando la apuesta de Amazon o Alibaba son los espacios físicos

Cáceres Tejedor lo tiene claro muy claro cuando responde a la pregunta de cuál ha sido el proyecto más complicado al que se ha enfrentado.

-La capacidad de servir a un cliente de manera global y responderle antes de 48 horas a cualquier incidencia. Tenemos equipos en donde tenemos proyectos, y también trabajamos en remoto.

-¿Por dónde irá este mundo altamente tecnológico del márketing sensorial?

-La digitalización es imparable. Hay que llegar a los clientes de manera diferente. El márketing sensorial es fundamental para crear esa experiencia de cliente en los espacios físicos. Además, nosotros intentamos replicar todas las herramientas de servicio del comercio electrónico del mundo online en el mundo físico. Nos hemos acostumbrado un nivel de servicio que hay que dárselo también a los usuarios en el espacio físico: tiendas, hoteles, aeropuertos, concesionarios, edificios corporativos... 

-¿Por ejemplo qué servicios?

-El cliente puede comprar el artículo aunque no se encuentre en el stock de la tienda. Es la unión de ambos mundos: comercio electrónico y físico.

 -¿La presencia física es importante?

-Por supuesto. La prueba es que muchas compañías del mundo online se están moviendo hacia el físico: Amazon, Alibaba, por ejemplo.

 -¿Por qué esa necesidad?

-Los seres humanos somos sociales. Nos gusta recibir el consejo, insustituible, de una persona en una tienda. O nos gusta palpar una textura.

-Los españoles podríamos llegar al nivel de los japoneses teniendo, por ejemplo, un novio virtual

-No lo sé. Los españoles también nos transformaremos. Culturalmente nos gusta la interacción social.

Alberto Cáceres fue incluido en el año 2019 en la lista Forbes de 100 most Creative People in Business, y en su currículo figura que es autor de una patenta de RFID (identificación por radiofrecuencia). Él asegura que, a pesar de haber trabajado en puestos de alta dirección de multinacionales con sede en el extranjero, él siempre ha vivido en España, donde están su mujer y su hija, una joven de 21 años que estudia publicidad. «Una profesión con mucho futuro porque -asegura- la publicidad es información».