Los economistas piden elevar la presión sobre los propietarios de montes abandonados

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

ECONOMÍA

Ines Varela Gomez

Un informe del Foro Económico de Galicia sugiere exprimir el marco legal para priorizar el aprovechamiento forestal

01 oct 2020 . Actualizado a las 09:30 h.

Los economistas gallegos creen que el monte tiene futuro, pero este pasa por iniciar una nueva relación con el territorio de forma práctica, más allá de las normativas ya escritas. El Foro Económico de Galicia dedica su última publicación a un análisis de la situación forestal, aportando claves para que deje de ser un problema -casi siempre vinculado a los incendios- y para que vuelva a convertirse en un sector productivo.

Albino Prada y Edelmiro López Iglesias ponen la firma a un documento con varias colaboraciones que se sustanciaron en el encuentro celebrado en la bodega ourensana Casal de Armán hace algo más de un año, del que se sacaron algunas conclusiones ahora plasmadas en un documento. Entre otras cuestiones, López Iglesias, profesor de Economía Aplicada de la USC, pone el acento en la necesidad de dejar de afrontar el problema forestal desde la perspectiva de la propiedad para empezar a hacerlo en base a sus usos y aprovechamientos. La estructura de la propiedad -hay un millón de hectáreas en manos de propietarios que no las trabajan, la mitad del total- condiciona cualquier actuación sobre los terrenos, pero entienden los economistas que debe propiciarse un «novo equilibrio» para darle futuro a las iniciativas privadas, determinantes por su gran volumen, y las públicas, responsables de promover «incentivos» para la puesta en valor. Según López Iglesias, hace seis décadas había en Galicia 800.000 personas vinculadas a la agricultura y otras tantas propiedades, y en la actualidad hay 50.000 trabajadores y el número de dueños de fincas rústicas ha crecido hasta los 1,7 millones. «A fórmula é penalizar aqueles que xeran problemas e impulsar fórmulas de explotación», para lo que ya existe normativa vigente. «O fundamental xa está recollido no marco legal actual», sostiene. En ese sentido, el Foro Económico pide que se insista en las acciones específicas para activar las tierras de propietarios desconocidos. Para ello, sugieren agilizar las declaraciones de grave abandono para que esos montes pasen provisionalmente al Banco de Terras y que, finalmente, pasen a ser gestionadas por personas o empresas interesadas, priorizando siempre a aquellas que actúen por cercanía, anclando población en el rural con intereses en su territorio. 

Incendios y buenas prácticas

Los expertos ofrecen más claves para dar con las teclas adecuadas para activar los montes. Por ejemplo, proponen que la Administración autonómica no centre sus análisis en las zonas improductivas o que sufren incendios de forma recurrente, sino que se refuercen los estudios en aquellas que sí están funcionando o que han esquivado la actividad incendiaria, tratando de exportar esas soluciones a zonas más conflictivas, que en el caso del fuego son las áreas más urbanizadas del eje occidental y la Galicia abandonada, en la zona oriental. Además, proponen identificar nuevos usos para el empleo de la madera y la apuesta pública por este material, una iniciativa que ya está en marcha pero que «ten máis percorrido».

Sobre las explotaciones en marcha, el Foro Económico apuesta por la diversificación de especies sin demonizar ninguna, con usos diversos que ven compatibles: desde la producción de madera de crecimiento rápido hasta la de maderas de calidad para surtir a la industria del mueble con materia autóctona, pasando por la explotación ganadera intensiva, la de pequeños frutos, el aprovechamiento de la biomasa o la valoración como espacio medioambiental. «Todo é compatible cunha boa ordenación», concluye López Iglesias.