Bienes de equipo, el sector del automóvil, los productos energéticos y las manufacturas lideran las caídas
21 sep 2020 . Actualizado a las 12:15 h.No son buenos tiempos para exportar. El que fuera uno de los motores de tracción de la recuperación se ha venido abajo en el 2020 con la pandemia. Las restricciones al flujo de mercancías y la movilidad, el cierre total de los mercados a causa del confinamiento y la incertidumbre sobre el futuro empresarial de meses vista ha lastrado al sector exportador español con un desplome de las ventas de un 14,6 % en los siete primeros meses del año respecto al mismo período del 2019. De enero a julio, el volumen de bienes comercializados con terceros países alcanzó los 147.487 millones de euros, según cifras recogidas por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Las importaciones siguieron el mismo trazo descendente, cayendo un 18,2 % hasta los 155.367 millones de euros. Como resultado, el déficit comercial de los siete primeros meses del año 2020 alcanzó los 7.880 millones de euros, un 54,2 % menos que el registrado en el mismo período de 2019.
En el mes de febrero las perspectivas de crecimiento de las exportaciones, aunque moderadas por las tensiones comerciales, se truncaron con el anuncio de cierre de fronteras de China. El efecto dominó en las economías no se hizo esperar. El desplome español transcurrió en paralelo al de otros países europeos como Francia (-21,1 %), el Reino Unido (-15,8 %) Italia (-14 %) y Alemania (-13,1 %). Fuera de Europa, también bajaron las ventas de Estados Unidos (-16,3 %), China (-4,1 %) y Japón (-15,9 %).
Es llamativa la contención del desplome en una economía tan ligada a los bienes de equipo y automóviles como es la alemana. Porque son precisamente estos dos sectores donde más se han resentido las ventas españolas al exterior, junto a los productos energéticos -en línea con el apagón de las fábricas-, y las manufacturas. Un resultado mucho más positivo obtuvieron los exportadores de productos de alimentación, bebidas y tabaco, los que mejor capearon el temporal.
¿Qué destinos se resienten más? Las ventas a terceros destinos -que representan el 39,4 % del total de exportaciones-, se redujeron un 17,4 % en este período. La caída es más moderada en las mercancías que aterrizan en la Unión Europea -un 60,6 % del total-. Estas descendieron un 12,6% en los siete primeros meses del año.
El ritmo de recuperación de las exportaciones no es todo lo rápido que se podría esperar. Según las estadísticas del Ministerio, en el mes de julio, en plena reapertura de la economía, las ventas al exterior se redujeron un 7,5 % respecto al mismo mes de 2019 y solo aumentaron un 3,3 % en comparación con el mes anterior. En pleno despegue, los sectores que más impulso cogieron fueron la alimentación y automóvil. Bienes de equipo, manufacturas de consumo y productos químicos siguen su tendencia descendente.
Galicia contiene la hemorragia
Las exportaciones gallegas en los siete primeros meses del año ascendieron a 10.608 millones de euros. La caída, ligeramente más moderada que el conjunto de la economía española, es del 14,3 % respecto al mismo período del 2019. Restando las importaciones, el balance comercial positivo asciende a 1.658 millones de euros.
La peor parte se la llevan Canarias, Asturias y el País Vasco. La comunidad insular se anota un desplome de las exportaciones del 32 %. Los canarios tan solo hicieron 1.076 millones de euros de caja exportadora desde enero hasta julio. Le siguen los asturianos. En su cuenta se han anotado una caída del 23,6 %. Tan solo lograron exportar 2.277 millones de euros en mercancías. Los terceros en la aciaga lista son los vascos. La comunidad se dejó un 21,6 % del pulso exportador que había registrado en el mismo período del 2019. A su caja entraron 11.915 millones de euros. En el polo opuesto se encuentra Extremadura. La región es la única que se anotó una subida en plena pandemia con las exportaciones disparándose un 6,8 %, con 1.318 millones de euros de ventas de mercancías al exterior.