El Gobierno prepara una tasa para gravar a compañías como WhatsApp o Telegram

C. V. MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Europa Press

La nueva ley también facilitará la retirada de las actuales cabinas de teléfono y de las guías telefónicas

12 sep 2020 . Actualizado a las 17:58 h.

El Gobierno regulará por primera vez a las plataformas de mensajería instantánea, como WhatsApp o Telegram. Estas compañías estarán obligadas a registrarse como operadoras y tendrán que pagar una tasa equivalente al uno por mil de sus ingresos si estos superan el millón de euros. Así lo establece el anteproyecto de Ley General de Telecomunicaciones que se somete desde este viernes y hasta el 13 de octubre a consulta pública. El secretario de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, Roberto Sánchez, prevé que la norma pueda entrar en vigor a mediados del 2021, cuando culminaría su tramitación parlamentaria después de la aprobación en Consejo de Ministros.

Una de las cuestiones que habrá que estudiar con respecto a este tipo de empresas es que muchas de ellas prestan sus servicios de manera gratuita, por lo que no contarían con ingresos procedentes de esta actividad. A este respecto, el secretario de Estado de Telecomunicaciones expuso que tendrán que analizar la presentación de resultados de todas las compañías registradas y que, hay que tener en cuenta la posibilidad de que los servicios que ahora se prestan de manera gratuita puedan cobrarse en el futuro: «Y WhatsApp no siempre ha sido gratuito», recordó Roberto Sánchez. La nueva ley no solo recoge la puesta en marcha de tasas específicas para estas plataformas. El texto irá un paso más allá y exigirá a las compañías una mayor transparencia con sus usuarios sobre las condiciones en las que prestan sus servicios. Además, demandará mayores garantías de seguridad e integridad de sus prestaciones.

Retirada de las cabinas

El objetivo que persigue este nuevo anteproyecto de ley es adecuar el servicio universal a las circunstancias actuales. Por ello, el texto facilitarla la retirada de las cabinas de teléfono y de las guías telefónicas. Actualmente existe una cabina en cada municipio de más de 1.000 habitantes. Sin embargo, este servicio ya no es rentable y cada año, el concurso queda desierto. Con estos datos sobre la mesa, la nueva ley prevé suprimir estos elementos como servicio universal de telecomunicaciones obligatorio. Eso sí, tal y como explica el Gobierno, esto no implicará que las zonas rurales se queden sin servicio de telefonía fijo, sino que dispondrán de otros servicios.