El consumo de carburantes se recupera en julio y agosto

La Voz MADRID / EFE

ECONOMÍA

Óscar Cañas | europa press

Cayó solo un 10 %, frente a los desplomes de hasta el 85 % durante el confinamiento

29 ago 2020 . Actualizado a las 19:19 h.

El consumo de carburantes de automoción se ha recuperado en julio y agosto, meses centrales de las vacaciones estivales, con una caída de solo el 10 % respecto al mismo período del año anterior y frente a los desplomes de hasta el 85 % registrados durante el confinamiento. Según datos de la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES) y de la Asociación de Operadores Petrolíferos (AOP), en julio y agosto la venta de gasolina y gasoil en las estaciones de servicio representó el 90 % del negocio registrado en el 2019. La recuperación tiene su explicación en el fin de las restricciones de movilidad en todo el territorio nacional desde el 21 de junio, cuando finalizó el estado de alarma, y el hecho de que muchos ciudadanos han optado por destinos nacionales para sus vacaciones.

«La venta en julio y agosto es de aproximadamente el 90 % de lo que hicimos en el 2019, que no fue un año malo. Es un buen dato, pero es importante tener en cuenta que marzo, abril, mayo y junio fueron terroríficos y que en el sector se registraron pérdidas espectaculares porque nos obligaron a seguir abiertos», aclara el presidente de CEEES, Jorge de Benito, quien apunta que en el acumulado de los ocho primeros meses del año la bajada estará por encima del 50 %.

Además, advierte que, aunque los datos de julio y agosto se pueden considerar buenos tras los descalabros registrados en meses anteriores, hay que tener en cuenta que en los sitios donde se han registrado rebrotes importantes «el consumo ha bajado y nos hemos ido a un 60 o 70 %». En cuanto a otros negocios habitualmente asociados a estaciones de servicio, De Benito destaca que han crecido respecto al año pasado los de lavado y las ventas en tiendas, en este caso porque los clientes han optado por diversificar su ocio, con un incremento de las salidas «al aire libre». Por el contrario, en hostelería la facturación ha caído más de un 30 % debido a dos factores: la reducción de aforos y las restricciones de horarios y el temor de los consumidores a contagios. «Las cafeterías y restaurantes generan mucho tráfico en las estaciones de servicio y aportan ingresos para su sostenimiento, máxime si se tiene en cuenta que la mayoría de lo que facturan por la venta de carburantes (un 70 %) son impuestos», afirma.