Alcoa completará el ERE y parará las cubas pese al interés de Liberty House

m. s. corral VIVEIRO / LA VOZ

ECONOMÍA

PEPA LOSADA

El grupo británico se muestra dispuesto a comprar la fábrica de A Mariña

30 jul 2020 . Actualizado a las 19:47 h.

Alcoa está decidida a ejecutar el ERE -que afectará a más de 500 trabajadores- y a parar las cubas en su fábrica de aluminio de San Cibrao, en A Mariña lucense, pese al interés del grupo británico Liberty House en comprar la fábrica.

La noticia sobre este posible comprador saltaba este jueves por la mañana en Lugo, en el transcurso de la negociación que mantienen Alcoa y el comité para el despido colectivo. La propia multinacional norteamericana informaba a los representantes de los trabajadores que había recibido una carta del presidente de Liberty House mostrando interés en el complejo industrial de A Mariña, no solo en la fábrica de aluminio, sino también en la de alúmina.

Alcoa enseguida aclaró que no tiene intención de vender esta última, y que está dispuesta a abordar el proceso de venta de la de aluminio a condición de antes parar todas las cubas (hibernarlas en palabras de la multinacional), para frenar las pérdidas que están generando. Números rojos que alcanzan los 1,2 millones de euros a la semana, según estimaciones de la propia Alcoa, que se muestra inflexible con la parada de cubas.

Lo explicaban desde la multinacional: «Alcoa recibió una carta de un grupo que expresa interés en adquirir la fábrica de San Cibrao, pero sin hacer ninguna propuesta concreta. Este comprador coincide con Alcoa al reconocer los problemas que tiene la planta de aluminio para asegurar su viabilidad; en particular en lo que se refiere al coste de la energía, pero no especifica cómo piensa resolver este problema, que es una de las causas principales de las importantes pérdidas en que está incurriendo la fábrica».

«Alcoa está dispuesta a estudiar un proceso de venta de la planta de aluminio, siempre y cuando se proceda previamente a la parada ordenada de las cubas, ya que un proceso de ese tipo requiere tiempo para ejecutarse y su éxito es incierto», reiteraban una vez más. «Alcoa no contempla la venta de la refinería de San Cibrao, cuya propiedad entera no le pertenece». Y es que la multinacional estadounidense tiene un 60 % de participación en la planta de alúmina, mientras que el 40 % restante pertenece a la australiana Alúmina Limited.

«La empresa proseguirá con las negociaciones del período de consultas. No se tomará ninguna decisión hasta que se haya completado ese proceso. Estamos enfocados en el proceso de consultas de despido colectivo que concluye el 4 de agosto y afecta a la planta de aluminio de San Cibrao, que acumula pérdidas significativas debido a dificultades estructurales y se encuentra en una situación que requiere una acción urgente», concluía Alcoa.

El comité de empresa, por su parte, mantendrá este viernes a primera hora de la mañana una reunión con el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, al que pedirán que, en su calidad de autoridad laboral, paralice el ERE. Solicitan además una nueva convocatoria urgente de la mesa multilateral con el Gobierno, Xunta, Alcoa, Liberty House y los sindicatos.

El presidente en funciones de la Xunta, Núñez Feijoo, se dirigía en las últimas horas a Pedro Sánchez instando al Ejecutivo a aprobar de manera inmediata el estatuto electrointensivo para fijar un precio competitivo de la energía. Incluso propuso Feijoo una intervención temporal de la fábrica, de ser necesario, para blindar la actividad y el empleo.

Vuelve a la carga tras la puja fallida por la fábrica de aluminio de A Coruña

No es la primera vez que Liberty House puja por una fábrica de Alcoa. El grupo británico, fundado por el magnate indio Sangeev Gupta, también presentó el año pasado una oferta para adjudicarse las plantas de aluminio que la multinacional estadounidense pretendía cerrar en A Coruña y Avilés. De hecho, era uno de los pocos inversores interesados en quedarse con las dos factorías en lote, aunque finalmente no se acabó llevando el gato al agua. Fue el fondo suizo Parter Capital el que se adjudicó las dos plantas para, pocos meses después, revenderlas a Riesgo.

Pese a no tener éxito en la compra de las fábricas de Alcoa, Liberty House ha estado muy activa en el mercado en los últimos años, lo que ha propiciado su crecimiento. En concreto, el grupo británico se hizo con media docena de factorías que Arcelor Mittal tuvo que vender en Europa como condición para que las autoridades de competencia de la UE le permitiesen comprar la italiana Ilva. Una operación con la que Liberty, un actor hasta entonces residual en el sector siderúrgico europeo, se convirtió en uno de los diez mayores productores del mundo, el tercero en Europa, con una capacidad de laminación de más de 18 millones de toneladas. Asimismo, a finales del 2018, el grupo británico desembolsó 500 millones de euros por la mayor factoría de aluminio primario de Europa, en Dunkerque (Francia), adquirida a la multinacional Rio Tinto y con una capacidad de producción de 270.000 toneladas al año.