Alcoa está dispuesta a escuchar ofertas por la planta de San Cibrao a condición de parar las cubas

M. S. Corral VIVEIRO / LA VOZ

ECONOMÍA

Pepa Losada

Considera que el proceso lleva tiempo «y su éxito es incierto»

27 jul 2020 . Actualizado a las 23:23 h.

El Ministerio de Industria pidió ayer a Alcoa que negocie la venta de la fábrica de aluminio de A Mariña con un inversor interesado en la planta y que, según el Ejecutivo, presenta un proyecto industrial solvente y de futuro. La empresa está dispuesta a escuchar y a negociar un proceso de venta, pero a condición de parar antes todas las cubas en electrolisis de manera ordenada, es decir, de hibernarlas. La multinacional estadounidense entiende que ese proceso requiere tiempo «y su éxito es incierto».

Alcoa argumenta que las pérdidas en la planta de aluminio son cuantiosas -1,2 millones de euros a la semana- y es necesario, «obligado», parar las cubas.

Para los más optimistas, la reunión de la mesa multilateral celebrada ayer a última hora entre el Gobierno, la Xunta, Alcoa y los sindicatos abre un nuevo escenario. Los más escépticos, en este caso los miembros del comité, creen que el hecho de paralizar las cubas no es una buena señal. «Sería irreversible», advierten, por eso se oponen abiertamente y así lo hicieron constar anoche en la reunión.

El secretario general de Industria, Raúl Blanco, insistió «para que Alcoa se avenga a negociar con un inversor industrial interesado en la planta de aluminio, que daría continuidad a las instalaciones a medio y largo plazo».

Blanco explicó «que hay un proyecto alternativo que, en el ámbito de la energía, apostaría por las renovables, en concreto por el hidrógeno verde, y con una inversión industrial en la planta que le garantizaría la rentabilidad en el futuro».

Cree el número dos del Ministerio de Industria «que ahora es el momento -aprovechando la prórroga del período de consultas hasta el 4 de agosto- de iniciar las negociaciones con el grupo inversor, puesto que Alcoa tiene claro que no quiere seguir. Y durante estas negociaciones no es necesario despedir a nadie». Hay que recordar que ahora se están discutiendo las condiciones del ERE para 534 trabajadores de la fábrica de aluminio en San Cibrao.

El conselleiro de Industria, Francisco Conde, también presente en la reunión, se mostró al final optimista y colaborador. «Asegúrasenos que hai un inversor disposto a desenvolver un plan industrial que non coñecemos e Alcoa está disposta a escoitar e negociar un proceso de venta. É algo, ábrese un novo escenario cando menos. Por iso nós pedimos agora a creación dun grupo de traballo para concretar ese posible proceso de venta. Tamén solicitamos que, mentres tanto, Alcoa pare o ERE e centremos a atención nese novo proceso co fin de garantir o emprego e un plan industrial para o complexo de San Cibrao».

Alcoa venía luego a frenar cierta euforia y a repetir una vez más lo que ya ha señalado en anteriores ocasiones: «La empresa escuchará propuestas, alternativas que se nos presenten, incluida la venta, aunque seguimos sin tener concreción de ese proyecto del que habla Industria. En cualquier caso, será un proceso que requeriría tiempo y una posibilidad de éxito incierta. Alcoa no puede seguir soportando más pérdidas con la planta de aluminio; por eso será necesario parar de manera ordenada las cubas».

El comité exige compromisos. Que se negocie la venta con este nuevo grupo de trabajo que se constituya. Confían en el plan industrial y en que la Xunta conozca a fondo el proyecto de este inversor. Mientras, mantienen la huelga indefinida en la fábrica, también en las auxiliares, y hoy, en principio, continuará la negociación del ERE en Lugo.